Isabel, una reina feliz para quienes mantienen la ilusión
Melchor tiene este año también nombre de mujer: Isabel Bueno Revuelta, la reina maga que todavía está pellizcándose
Posiblemente una de las mejores cosas que sucedan en el salón de plenos del Ayuntamiento de Córdoba a lo largo del año sea el ya tradicional sorteo para encarnar a Melchor en la Cabalgata de Reyes que en la próxima edición, según el concejal de festejos señor Urbano, será la repanocha. Desveló don Julián en la bienvenida al acto que las carrozas están recién llegadas a Córdoba y él, que las ha visto (claro) dice que son espectaculares.
Pero en ese momento revelador del edil festero la mucha gente congregada en el salón principal de la casa consistorial y en la planta de abajo, siguiendo el evento a través de pantallas instaladas a tal efecto, poco les importaba cómo fueran los carruajes sino la posibilidad de montar uno de ellos. Han sido 328 participantes este año los que han buscado la suerte maga de ser rey por un día. Pero no cualquier monarca, evidentemente, sino el primero de los tres hombres sabios que llegan el 5 de enero.
Eran también tres los bombos que la ONCE había instalado para que la suerte diera vueltas y dictaminara su feliz sentencia, todo ello amenizado previamente por trabajadores de la organización de ciegos que habían sacado voluntarios de los asientos para cantar villancicos acompañados por el público asistente, y de paso tirar caramelos al respetable, a modo de ensayo para la próxima noche mágica.
La ilusión que todo lo puede
El alcalde José María Bellido estaba recién llegado de un acto lleno de ilusión - el diseño urbanístico de la nueva Córdoba- para meterse en otro del mismo cariz. Ocurre que, en palabras del primer edil, lo mejor de la ilusión que se respiraba en el salón de plenos es que es mantenida y renovada desde la infancia. Y desde luego que es así. Bellido lo sabe porque él, a pesar de las desilusiones que la política y la vida provocan, es un hombre optimista y un alcalde en constante motivación tirando de una ciudad que en demasiadas ocasiones se ha sentido defraudada. A todos los ilusionados allí presentes quiso aplaudir don José María.
Algunos, no obstante, pronto desfallecieron en cuanto salió el primer número, el 3, lo que acotaba la cosa a los trescientos. La centena despejó un poco la sala cuando se marcharon los menos ilusionados. El resto mantuvo la fe y el tipo a pesar de tener la certeza de que no les tocaría. Isabel Bueno Revuelta era una de las que se quedaron porque además sabía que aún tenía posibilidades.
Una reina maga
Con la combinación de los dos bombos restantes salió el número de Isabel, trabajadora de Fepamic, de 50 años de edad y con un hijo que recién ha sacado una plaza de policía local en Ronda. Isabel gritó de felicidad, se plantó en dos saltos junto a la zona noble de los bombos y a partir de ahí todo fueron abrazos, risas y lágrimas de emoción. Isabel, trabajadora de Fepamic, de 50 años de edad y con un hijo futuro policía local en Ronda, provincia de Málaga, confesó entre abrazos y felicitaciones que ella sospechaba que le podía tocar porque el año se le estaba dando bien, sobre todo desde que supo, hace unos semanas, que su hijo tendría un trabajo fijo. En cuanto a su afán por reinar como Melchor, este era su décimo tercer intento, lo que demuestra que los supersticiosos también se equivocan.
Isabel Bueno Revuelta, de 50 años de edad, nos invitó a todos a que pasáramos por el puesto que Fepamic ha instalado esta Navidad en Las Tendillas, siguió llorando de emoción, riendo por lo mismo, sintiendo rubor a ratitos y flotando en una nube que solo la gente ilusionada sabe disfrutar.
La próxima noche del 5 de enero la veremos reinar en su carroza, repartiendo lo que el paso de los años nos quita pero que aparece cada año por esa fecha entre la nostalgia y el deseo más puro. De momento, esta nueva monarca llamada Isabel nos ha enseñado algo muy importante, y es que los reyes magos no son los padres, sino las madres.