Imagen del Valle de los Caídos desde la hospedería
Ayuso tendrá que justificar por qué no quiere declarar Bien de Interés Cultural el Valle de los Caídos
Un informe de apoyo ha obligado a que la Comunidad de Madrid tenga que «razonar» esta negativa
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) obliga en una sentencia a la Comunidad de Madrid a «razonar» porque no quiere declarar Bien de Interés Cultural (BIC) el Valle de los Caídos. El órgano de justicia considera que los particulares que lo solicitan tienen derecho a obtener «una respuesta expresa y razonada» sobre la procedencia o no de la incoación del expediente.
En la resolución, los magistrados estiman parcialmente el recurso interpuesto por la Asociación para la Defensa del Valle de los Caídos que aportó un informe de apoyo respecto el monumento madrileño y que demostrase la importancia de este.
Por su parte, la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid desestimó la solicitud presentada por la entidad defensora y no aceptó que se declarase Bien de Interés Cultural al Conjunto Monumental del Valle de los Caídos.
La Sala acuerda condenar a la Comunidad de Madrid a que resuelva razonadamente el porqué de esta negativa y notifique su decisión a la asociación recurrente, la Asociación para la Defensa del Valle de los Caídos. La presente sentencia es susceptible de recurso de casación.
Imagen del Valle de los Caídos
El Ejecutivo regional alegó en el procedimiento que «no tiene competencia para declarar BIC un bien cultural adscrito al Estado». Sin embargo, el TS indica que «los particulares (la Asociación) tienen derecho a obtener una respuesta expresa y razonada sobre la procedencia o no de la incoación del expediente».
La entidad defensora del Valle de los Caídos quiere que se «examine con luz los criterios técnicos oportunos, al menos 'prima facie', la posible concurrencia un valor relevante del bien contemplado en la solicitud, con referencia a sus valores históricos, artísticos, arquitectónicos o paisajísticos».
Hay que recordar que según la Ley de Patrimonio Histórico Español, las comunidades autónomas tienen competencia para declarar Bien de Interés aquel inmueble que, encontrándose en su territorio, goce de valor histórico o cultural, tal y como ocurre con el Valle de los Caídos y la Comunidad de Madrid.
Complejo monumental del Valle de los Caídos
Motivo de la polémica
La lucha entre ambos organismos se debe a que en junio de 2006 se publicó un Decreto en el que se declaraba que el Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial era un Bien de Interés Cultural, pero el Valle se excluía de este perímetro.
Esta declaración comprende una superficie de 99.619.113,00 m², más otros 20.187.940,30 m² calificados como «entorno del bien» lo que hace un total de 119.807.053,30 metros cuadrados.
Esta superficie se reparte en los municipios de: San Lorenzo de El Escorial, Santa María de la Alameda, Zarzalejo, El Escorial, Valdemorillo, Colmenarejo, Galapagar, Collado Villalba, Guadarrama y Provincia de Ávila.
El Valle de los Caídos
El escrito oficial excluye de toda la superficie BIC (Bien de Interés Cultural) una parte del municipio, el histórico Valle de los Caídos. El grupo parlamentario Vox ha recogido en varias ocasiones dos alegatos para que se incluya este conjunto monumental dentro de este grupo de edificios culturales e históricos.
Vox argumenta que el Valle de los Caídos debe considerarse BIC por estar situado dentro de la Cerca Histórica de Felipe II, es decir, dentro del perímetro considerado Bien de Interés Cultural.
Ante el alegato de la Comunidad sobre que al ser un «bien de Patrimonio Nacional y, por tanto, de competencia estatal y no puede declararlo Bien de Interés», subrayan que es una justificación «absurda, pues el bien que da pie a la declaración y alrededor del cual se articula todo el contenido de dicha declaración, que es el Real Sitio, es igualmente un bien de patrimonio Nacional y por tanto de naturaleza estatal».
Para los vecinos de San Lorenzo, el Valle de los Caídos es «un lugar más donde hay una iglesia donde se celebran bodas, bautizos, comuniones... También hay un colegio y una escolanía. Es un sitio más que tiene vida propia».
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