Isabel Díaz Ayuso y la consejera de Familia, Ana Dávila
El Gobierno de Ayuso responde a López por acusarles de racistas: «Mercadear con los menores sí que lo es»
También señalan que los sistemas y centros de protección para menores inmigrantes de la región están «tensionados y colapsados»
La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, Ana Dávila, ha señalado que «no hay nada más racista que mercadear con los menores» inmigrantes para excluir a Cataluña y el País Vasco del reparto «maquillado de solidaridad por razones meramente políticas», después de que el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública y secretario general del PSOE-M, Óscar López, cargara este viernes contra el «racismo puro» de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso.
En declaraciones a los medios tras un acto en Arganda del Rey, Dávila ha respondido así a las declaraciones de López y ha defendido que lo que hace el Gobierno central es «apoyar y ser un socio colaborador de las mafias».
«No hay nada más racista que colaborar con los independentistas para excluir de un reparto maquillado de solidaridad a comunidades autónomas como Cataluña o el País Vasco por razones meramente políticas, como son contentar a los independentistas para mantener a Sánchez en el poder, y no hay nada más racista que mercadear con los menores para ello», ha detallado la consejera de Asuntos Sociales.
Por su parte, la consejera de Economía, Rocío Albert, ha censurado que López acuse de «racismo puro» a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, y le ha pedido que distinga entre «lo que es un refugiado temporal, como fueron los ucranianos, y lo que son los migrantes».
«De racismo nada», ha subrayado la consejera madrileña en declaraciones a los medios tras una visita a la joyería Deassín de la capital en las que ha subrayado que en la Comunidad están «encantados de los inmigrantes que han venido aquí a convertir su vida en su proyecto de vida, que trabajan, que estudian y se forman».
Albert ha insistido que el Gobierno regional recurrirá en los tribunales el decreto de reparto de menores «porque se ha hecho de forma unilateral» y «no se ha tenido en cuenta a las Comunidades Autónomas».
«De forma unilateral se ha decidido excluir a dos comunidades autónomas, que es, como siempre, País Vasco y Cataluña, y que deberían estar incluidas en el decreto», ha sentenciado.
Cierre del centro de Pozuelo
Tras la crítica de López por el cese temporal del Centro de Recepción, Atención y Derivación (Creade) de refugiados de Pozuelo de Alarcón a finales de julio, Dávila ha respondido que el Sistema de Protección a la Infancia de la Comunidad de Madrid atiende a «todos los menores en situación de riesgo o desamparo, independientemente de su origen y de la situación en la que provengan».
«Los menores ucranianos vinieron acompañados de sus familias, no vinieron solos y no vinieron como estos menores de manos de las mafias», ha expresado Dávila.
Respecto al recurso presentado por el Gobierno central este jueves precisamente por el cese de actividad del centro de Pozuelo de Alarcón, la consejera de Asuntos Sociales ha calificado esta reacción de «improvisación frente a la crisis migratoria».
«Es un Gobierno que genera el problema porque no actúa donde tiene que actuar, no actúa en origen, no actúa controlando las fronteras», ha esgrimido Dávila, que se ha preguntado también «¿dónde están el Ministerio de Defensa, el de Asuntos Exteriores o el del Interior, que son los que tienen la obligación y el deber de proteger las fronteras?».
Sobreocupación del 140 %
Dávila también ha señalado que los sistemas y centros de protección para menores inmigrantes de la región están «tensionados y colapsados» y que «la sobreocupación gira en torno al 130 %-150 % durante estos meses».
«Llevamos ya dos años, desde que vivimos esta crisis migratoria, hablando del tensionamiento de nuestros centros. No lo decimos nosotros, lo dice nuestra capacidad de atención, por eso tuvimos que poner en marcha un nuevo centro, el de La Cantueña en Fuenlabrada, porque nuestros centros ya estaban sobresaturados, pero también lo dicen los técnicos que están trabajando con nosotros», ha desgranado Dávila.