James Middleton ha puesto en marcha varios negocios, todos ellos sin bastante éxito
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Los negocios de James Middleton, en el punto de mira
El hermano de Catalina de Inglaterra pretende convertirse en el próximo Richard Branson
Según sus amigos, James Middleton, aspiraba a ser como Richard Branson. Sin embargo, el hermano de Catalina de Inglaterra dista mucho de parecerse al multimillonario dueño de Virgin. Al menos, por el momento, ya que no ha conseguido que su empresa supere las pérdidas millonarias a las que se enfrenta.
El negocio enviaba cajas personalizadas de malvaviscos por más de 24 libras la unidad y tan solo ha conseguido mantenerse en el mercado durante ocho años. El hermano menor de Kate ha comunicado a sus acreedores que se enfrentaban a la posibilidad de recuperar únicamente 25 peniques por cada libra invertida en el negocio, tal y como informa el Daily Mail. Consiguió recaudar 2.4 millones de euros gracias a sus accionistas, entre los cuales se encontraba su cuñado, James Matthews, marido de su hermana mayor, Pippa.
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Quien también quiso ayudar a este particular «Wonka» –así se hacía llamar en referencia a Charlie y la fábrica de chocolate– fue Nick Jenkins, un popular magnate que calificó Boomf como una forma muy personal y sabrosa de decir feliz cumpleaños, gracias o felicidades.
Sin duda, ha sido una auténtica decepción para el menor de los Middleton, que siempre han hablado de su buena suerte en los negocios. De hecho, antes de que su hija se convirtiese en heredera al trono, amasaron una fortuna con una empresa que proporcionaba material para fiestas temáticas.
Su tío Gary Goldsmith fue quien le prestó la inversión inicial de su primer negocio Cake Kit, cuyo objetivo era proporcionar kits para personas demasiado ocupadas para hacer bizcochos y tartas desde cero. Sin embargo, tampoco acabó del todo bien.
Quizás su rumbo cambie si se deja asesorar por Alizee Thevenet, una analista financiera francesa con quien actualmente vive en el campo y con quien se casó el pasado mes de septiembre en una idílica ceremonia secreta, después de superar una depresión, enfermedad que calificó como «cáncer de la mente». Por ahora, tendrá que conformarse con otro de sus proyectos, Ella&Co, una empresa que vende comida cruda liofilizada para perros.
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