El desayuno de la Reina Letizia a las 3 de la mañana durante su etapa en informativos

En la sabiduría popular se dice que el desayuno debe ser abundante como el de un rey, el almuerzo moderado como el de un príncipe, y la cena ligera como la de un mendigo. Ahora que conocemos los detalles del desayuno diario de la Reina Letizia cuando trabajaba en informativos, queda claro de dónde obtenía la fuerza y la energía necesarias para enfrentar cada jornada.

No es un secreto que la Reina Letizia tiene un gran interés por la gastronomía y sigue un plan alimenticio variado que incluye una amplia gama de alimentos, aunque es particularmente estricta en consumir alimentos bajos en grasas y de alta prioridad nutricional. En el Palacio de la Zarzuela, se cuida meticulosamente su dieta, siendo ella misma quien supervisa cada detalle. Según algunos expertos, Letizia sigue la dieta Perricone, desarrollada por el dermatólogo estadounidense Nicholas Perricone. Esta dieta es reconocida mundialmente por sus beneficios antiedad, fortaleciendo el sistema inmunológico, previniendo el envejecimiento prematuro y mejorando la salud de la piel desde dentro, para conseguir un aspecto radiante y saludable.

Sin embargo, cuando la Reina Letizia era periodista, los estándares alimenticios no eran precisamente su prioridad. Un divertido y revelador video que circula en la red social 'X', antes conocida como Twitter, nos muestra cómo Letizia enfrentaba sus desafiantes horarios laborales cuando trabajaba en turnos de madrugada. En una entrevista para el programa Lo + Plus, conducido por Máximo Pradera y Fernando Schwartz, una joven Letizia compartía sus hábitos matutinos atípicos: «Hay que desayunar bien porque luego hasta las 16:30 o 17 horas no puedes comer», explicaba con naturalidad.

En el divertido video, Letizia comparte con buen humor que solía desayunar alrededor de las 02:30 o 03:30 de la mañana: «¡Merluza en salsa, caldillo extremeño... y se trabajaba de bien!», exclamaba entre risas. Este episodio no solo nos ofrece una visión entretenida de los hábitos alimenticios poco convencionales de la Reina antes de su actual rol, sino que también muestra cómo enfrentaba con energía y buen humor los desafíos de su carrera periodística. La declaración no pasó desapercibida y sus compañeros en el programa bromearon al respecto: «¿Y con un buen vino tinto, no? Con todo lo que eso aporta en calorías. Siempre la vemos en primer plano, ¡y sudando!».

De hecho, comenzar el día con platos como merluza en salsa y caldillo extremeño puede proporcionar una carga inicial de nutrientes y energía beneficiosa, ideal para aquellos con horarios de trabajo prolongados o atípicos. La merluza en salsa suele contener entre 200 y 300 calorías por porción, mientras que el caldillo extremeño, con su combinación de carne y otros ingredientes calóricos, puede oscilar entre 300 y 500 calorías o más, dependiendo de cómo se prepare y la cantidad servida.