Irene Urdangarin
Irene Urdangarin cumple 20 años: así es su vida en Oxford, lejos de su novio
Estudia en Oxford, vive en una residencia universitaria y mantiene una relación estable con Juan Urquijo a distancia
La sobrina del rey Felipe VI ha elegido una vida serena, entre libros, rutinas sencillas y un amor reservado. La hija menor de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, Irene Urdangarin, cumple veinte años en plena transformación personal. La sobrina del Rey Felipe VI no pretende convertirse en personaje público: su propósito es claro, pasar desapercibida. Algo complicado para quien ocupa el décimo puesto en la línea de sucesión al trono español.
Como muchos jóvenes de su generación, decidió tomarse un respiro antes de comenzar su etapa universitaria. Durante ese año sabático, viajó a Camboya para colaborar como voluntaria con la ONG del jesuita Kike Figaredo y, además, aprovechó el tiempo para sacarse el carné de conducir.
La Infanta Cristina de Borbón y su hija Irene Urdangarin en 2024 de compras en Madrid
En Oxford
En septiembre de 2024, se trasladó a Oxford para comenzar sus estudios en Hostelería, Gestión de Eventos y Turismo en Oxford Brookes University, una institución de prestigio internacional. Vive en el campus de Headington, a poco más de un kilómetro del centro histórico, donde comparte apartamento con otros estudiantes. Cocina, limpia y se organiza como cualquier chica de su edad. Antes de empezar el curso, ya tenía preparado el kit de limpieza exigido, junto con sábanas, toallas, vajilla y todo lo necesario para su nueva vida independiente.
Su rutina académica es tan exigente como la de sus compañeros. Asiste a clases presenciales de lunes a viernes, de 9:00 a 18:00, que combinan conferencias, seminarios, prácticas y sesiones de orientación académica. Durante este primer año se ha formado en áreas como marketing, gestión financiera, turismo responsable y organización de eventos. Aunque aún es pronto para definir su rumbo profesional, la joven está sentando unas bases sólidas.
Doña Sofía con su nieta Irene Urdangarin
A distancia
El programa también introduce a los alumnos en la llamada «economía de la experiencia», mediante estudios de caso sobre destinos turísticos, grandes eventos y modelos de negocio en el ámbito hotelero. El plan docente incluye visitas de campo y recorridos virtuales —tanto locales como internacionales— con especial atención al ecosistema turístico de Oxford y a casos globales de referencia.
En estos días, lo más probable es que ya haya finalizado sus exámenes del segundo semestre, que en su universidad se celebran entre finales de mayo y principios de junio. Aunque no hay confirmación oficial sobre sus planes, se prevé que pase parte del verano en España, donde suele reencontrarse con su familia y su pareja, siempre lejos del foco mediático. Es posible que visite a su madre en Ginebra, que la acompañe a supervisar las obras de la casa familiar en Barcelona, o que pase unos días con su padre en Vitoria.
Lo que sí parece casi seguro es que aprovechará al máximo para pasar tiempo con Juan Urquijo, su novio desde unos dos años. Hijo menor de Lucas Urquijo y Beatriz Moreno de Borbón-Dos Sicilias, y hermano de Teresa Urquijo —esposa del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida—, Juan y la joven se conocen desde la infancia. Sin embargo, fue durante un verano reciente, gracias a Victoria Federica, cuando se reencontraron y comenzó su historia. Ahora que él está a punto de convertirse en tío, no sería de extrañar que la sobrina del Rey aproveche también para conocer al recién nacido y pasar algo de tiempo en familia, ya más integrada en el círculo Urquijo-Madrid.
Las apariciones públicas de la pareja han sido escasas y siempre fortuitas. La última, durante la pasada Semana Santa en Málaga, mostró a la joven visiblemente incómoda ante los fotógrafos. Desde entonces, ha intensificado su empeño en proteger su intimidad. La próxima aparición pública podría darse en el bautizo del hijo del alcalde, donde Juan ejercerá como padrino.
Irene Urdangarin y Johanna Zott animan a Pablo Urdangarin
El vínculo con su familia permanece sólido. Siempre ha estado al lado de su madre en los momentos más delicados. También mantiene una relación cercana con sus tres hermanos, especialmente con Pablo, jugador de balonmano, a quien ha acompañado en varias ocasiones.
La Infanta Cristina y su marido Iñaki Urdangarin el dia del bautizo de su hija Irene
En lo estético, apuesta por la sobriedad y la comodidad. Nada en su imagen parece impostado: blusas amplias, pantalones holgados, tonos neutros y un estilo boho discreto que se aleja de la rigidez del protocolo clásico. Físicamente, el parecido con su padre es innegable, pero en carácter y afectos está profundamente unida a su madre. Como curiosidad, el día de su bautizo, la entonces Princesa Letizia estaba embarazada de la que sería su primogénita, la Princesa Leonor, nacida el 31 de octubre de ese mismo año. Una coincidencia que, con el tiempo, uniría a ambas generaciones de forma discreta pero simbólica dentro del entramado familiar.
