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02 de mayo de 2024

Mahsa Yazdani junto a su hijo Mohammad Javad Zahedi

Mahsa Yazdani junto a su hijo Mohammad Javad ZahediTwitter

Condenan a 13 años de cárcel a una madre por denunciar la muerte de su hijo durante una protesta en Irán

El joven fue asesinado en una protesta contra el régimen de los ayatolás en septiembre de 2022

Las protestas contra el régimen de los ayatolás en Irán, del pasado año, siguen trayendo cola. Aunque las reivindicaciones para acabar con la República Islámica se han atenuado, los iraníes que decidieron salir a la calle siguen pagando las consecuencias. Mahsa Yazdani es un claro ejemplo de ello.
Un tribunal iraní ha condenado a 13 años de prisión a Yazdani cuyo hijo murió, al parecer, tras recibir repetidos disparos a quemarropa de las fuerzas de seguridad del régimen, por exigir justicia para su hijo en las redes sociales.
Su hijo, Mohammad Javad Zahedi, de 20 años, fue asesinado en una protesta contra el régimen en septiembre de 2022. Ahora, Yazdani ha sido condenada por cargos de blasfemia, incitación, insultos al líder supremo y difusión de propaganda contra el régimen, según han denunciado varios grupos de derechos humanos y familiares.
La familia de Zahedi denunció que el joven recibió varios disparos a quemarropa en la espalda y la cabeza. De hecho, un informe médico forense confirmó que había muerto por numerosos perdigones de escopeta. Los vídeos y fotos del cadáver del joven acribillado se hicieron virales en las redes sociales durante las protestas masivas desencadenadas por la muerte, bajo custodia policial, de la joven kurda Mahsa Amini.
Tras la muerte de su hijo, Yazdani condenó públicamente los ataques del régimen contra los manifestantes y pidió justicia para su hijo y los demás muertos en las manifestaciones. Su juicio y condena tuvieron lugar poco después de que fuera detenida en su domicilio, el pasado 22 de agosto.
El padre de Mohammad también ha sido objeto de la percusión del régimen de los ayatolás. El hombre pidió públicamente clemencia para su hijo antes de su ejecución y reclamó justicia para él y otros jóvenes manifestantes en las redes sociales. A raíz de estas declaraciones, fue detenido en agosto y, se cree, que aún permanece recluido.

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