El motorista en un momento de la grabación
Seguridad vial
Un motorista hace huelga de velocidad delante de los Mossos para demostrar lo que ocurre por ir despacio
Circular por debajo del 50 % de la velocidad máxima de una carretera es sancionable, se trata de una infracción grave que acarrea una multa de 200 euros
Cataluña es una de las pocas comunidades autónomas en las que pueden verse helicópteros vigilando las carreteras. Hace décadas que esta comunidad tiene transferida las competencias de tráfico, por lo que los Mossos cuentan con sus propios helicópteros que controlan las carreteras.
Tal y como ya hemos contado en El Debate, en el resto de España los helicópteros de la DGT llevan semanas en tierra por falta de empresa adjudicataria del contrato de mantenimiento y vuelo.
Helicópteros de Cataluña
Los propios agentes han mostrado un vídeo muy peculiar en el que puede verse a un motorista circulando entre 40 y 45 kilómetros a la hora, una actitud que provoca que numerosos coches le sigan en la carretera en lo que parece un atasco importante.
La hilera de coches provocada por el motorista
Los Mossos indican que el motorista comenzó su actitud al detectar al helicóptero, reduciendo la velocidad y avisando de su presencia a otros vehículos.
De 90 y 70 kilómetros/hora
Por el tipo de carretera parece que puede estar limitada a 70 y 90 kilómetros/hora en función del tramo, lo que significa que circula en torno a la mitad. Los agentes controlan su actitud desde el helicóptero de tráfico, y en un momento dado unos agentes de tierra le dan el alto para que se detenga, lo que permite que el tráfico recupere la normalidad.
De acuerdo con el Reglamento General de Conductores, vigente también en Cataluña, circular a una velocidad anormalmente reducida también es sancionable.
El helicóptero graba todo lo que sucede
En este caso suele hablarse de una velocidad inferior a la mitad de la velocidad máxima de la carretera, por lo que todo apunta a que este conductor va a ser sancionado con hasta 200 euros, por lo que parece ser una infracción grave contra el código de circulación.
Multa a la que podría sumarse otra similar por avisar a otros vehículos de la presencia de un control aéreo de la Policía.