El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) considera que Zemmour no puede escudarse en la libertad de expresión para denigrar a los musulmanes
El Tribunal de Estrasburgo condena a Éric Zemmour por discurso de odio anti–musulmán
Zemmour presentó a los musulmanes que viven en Francia como «colonizadores e invasores en lucha para islamizar el territorio francés»
El Tribunal de Estrasburgo ha ratificado la condena por discurso de odio anti–musulmán que ya impuso la Justicia francesa al excandidato al Elíseo Éric Zemmour por sus declaraciones de 2016 en las que comparaba el Islam y con el yihadismo.
En su sentencia, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) considera que Zemmour no podía escudarse en la libertad de expresión porque sus palabras en un programa de televisión no se limitaron a criticar el Islam, sino que tenían «una intención discriminatoria» para provocar «la exclusión de la comunidad musulmana en su conjunto» en Francia.
Zemmour presentó a los musulmanes como 'colonizadores' e 'invasores' en lucha para 'islamizar' el territorio francés
Odio religioso
Es decir, que da la razón a los jueces franceses que en primera instancia en 2017 y en apelación en 2018 le condenaron por provocar la discriminación y el odio religioso, y le impusieron una multa que finalmente quedó en 3.000 euros.
El TEDH hace hincapié en que el polémico periodista, que entró en la política activa al concurrir a las presidenciales de abril pasado, presentó en esa entrevista a los musulmanes que viven en Francia «como 'colonizadores' e 'invasores' en lucha para 'islamizar' el territorio francés» y recuerda que la consecuencia que sacaba es que tenían que «elegir entre el Islam y Francia».
Es decir, que había una serie de «aserciones negativas y discriminatorias» que buscaban «atizar una fractura entre los franceses y la comunidad musulmana en su conjunto». Y eso con «términos agresivos manifestados sin matices para denunciar una 'colonización' de Francia».
El alcance de las palabras
La corte europea, que insiste en la importancia de «luchar contra la discriminación racial en todas sus formas y manifestaciones», destaca que Zemmour, en tanto que periodista, no solo tenía una serie de «deberes y responsabilidades», sino que además era consciente del alcance y de las consecuencias de sus palabras en un programa de televisión.
Vivimos desde hace treinta años una invasión
En definitiva, el tribunal rechaza la demanda del político, que pretendía ampararse en la libertad de expresión, tal y como está recogida en el Convenio Europeo de Derechos Humanos.
En la entrevista objeto de este contencioso, emitida por el canal France 5 el 16 de septiembre de 2016 dentro de la promoción de uno de sus libros, Zemmour dijo entre otras cosas que «todos los musulmanes, digan lo que digan, consideran a los soldados de la yihad como buenos musulmanes, guerreros, soldados del Islam».
Igualmente denunció que en Francia «vivimos desde hace treinta años una invasión, una colonización que supone una conflagración».
Y que en muchos barrios del país «en los que muchas jóvenes van con velo, lo que hay es el Islam, la yihad, la lucha para islamizar un territorio que no lo está, que normalmente es una tierra no islamizada, una tierra de infieles. Es lo mismo, es la ocupación del territorio». Por ello, su conclusión fue que los musulmanes que viven en Francia tienen que «elegir entre el Islam y Francia» y «separarse de su religión».
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