El adelgazamiento sin causa aparente puede ser grave
Por qué hay que consultar al médico cuando se adelgaza sin querer
Adelgazar de forma involuntaria puede ser signo de un trastorno médico grave
Perder peso sin hacer dieta puede parecer algo mágico achacable a una mejor alimentación o a un cambio de rutinas, aumento de ejercicio y mejoría en el sueño nocturno. Sin embargo, cuando no hay un motivo real, el adelgazar puede ser motivo de preocupación. Consultar con el médico es la mejor manera de salir de dudas. Profesionales de la Clínica Universidad de Navarra explican que «toda pérdida de peso importante que una persona previamente sana no ha buscado deliberadamente suele indicar la existencia de una enfermedad sistémica».
Enfermedades asociadas
- Los tumores del aparato digestivo, incluidos los de páncreas e hígado, pueden menoscabar tempranamente la ingestión de alimentos y producir pérdida de peso antes de que aparezcan otros síntomas. Un estudio del Instituto del Cáncer Dana-Farber y la Escuela de Medicina de Harvard en Boston, acaba de concluir que los profesionales de la salud que perdieron peso en los dos años anteriores tuvieron un riesgo significativamente mayor de cáncer durante los 12 meses siguientes en comparación con aquellos sin pérdida de peso reciente. El cáncer del tracto gastrointestinal superior fue particularmente común entre los participantes con pérdida de peso reciente en comparación con aquellos sin pérdida de peso reciente.
- El cáncer de pulmón puede manifestarse en la forma de neumonía postobstructiva con disnea, o tos y hemoptisis, pero también suele cursar sin síntomas y debe sospecharse incluso en personas no fumadoras.
- La depresión y el aislamiento pueden originar pérdida importante de peso, en particular en los ancianos. En la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y en la insuficiencia cardíaca congestiva llega a aparecer anorexia y un mayor gasto energético en reposo.
- El adelgazamiento puede ser la primera manifestación de algunas enfermedades infecciosas, como la infección por el VIH, la tuberculosis, las endocarditis y las infecciones fúngicas y parasitarias.
- El hipertiroidismo o el feocromocitoma aumentan el metabolismo basal; los ancianos con hipertiroidismo apático pueden presentar pérdida de peso y debilidad, con pocas manifestaciones más de tirotoxicosis.
- La diabetes mellitus de aparición reciente suele acompañarse de adelgazamiento a causa de la glucosuria y de la pérdida de los efectos anabolizantes de la insulina.
- La insuficiencia suprarenal puede sospecharse por la hiperpigmentación, la hiponatremia y la hipercaliemia.
Síntomas que pueden preocupar
La nutricionista Almudena Villasclaras Crisóstomo explica en un artículo en Topdoctors que la pérdida de peso se considera preocupante cuando la persona pierde más del 5 % de su peso corporal normal en 6 a 12 meses o menos sin saber la razón.
La profesional afirma que existen varios factores que pueden ser claves para determinar la existencia de una enfermedad asociada a esa pérdida de peso sin causa justificada: «Ciertos síntomas pueden alertarnos, entre ellos se encuentran: diarreas frecuentes, náuseas, disminución del apetito, la dificultad para ingerir alimentos o el rechazo a los mismos, entre muchos otros. Esto no es determinante, dado que existen otro tipo de enfermedades que, sin síntomas aparentes, pueden provocar la bajada excesiva de peso».
Otros de los síntomas ante los que hay que prestar especial atención son:
- Síntomas febriles
- Hipertensión
- Fuertes dolores asociados al aparato digestivo
- Alteraciones en la orina, en la frecuencia cardíaca, así como alteraciones en la piel y las mucosas
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