No es posible congelar indefinidamente los alimentosPixabay

Alimentación

La forma en que estás descongelando el pescado puede intoxicarte

Una experta explica cómo descongelar el pescado envasado al vacío

Conservar los alimentos en el congelador es una práctica común en los hogares que desean mantener la frescura durante más tiempo. Al someterlos a temperaturas muy bajas, el movimiento de sus moléculas se reduce, lo que provoca que los microorganismos presentes pasen a un estado inactivo, aunque no llegan a eliminarse por completo. En otras muchas ocasiones se compra directamente el pescado congelado envasado al vacío.

En un vídeo de Instagram, Mariana Zapién, ingeniera de alimentos, conocida en redes sociales como @ingdetusalimentos, explica los riesgos de un mal descongelado: «Los pescados envasados al vacío están en un ambiente sin oxígeno y cuando se descongelan dentro del paquete se crea el lugar perfecto para el crecimiento de una bacteria llamada Clostridium botulinum. Esta bacteria no necesita oxígeno para vivir y crecer en ambientes poco ácidos, además de que puede formar esposa, una especie de cápsula de protección, para cuando no se tienen las condiciones adecuadas para su crecimiento». La experta añade: «Si estas esporas encuentran las condiciones adecuadas de temperatura, humedad y oxígeno se activan y pueden producir toxinas muy peligrosas, como la botulínica que causa el botulismo una enfermedad grave que puede llegar a causar una parálisis respiratoria».

Cómo descongelar el pescado

«Si descongelas el pescado con el paquete sellado, y además lo haces de manera incorrecta, –dejándolo a la temperatura ambiente o colocándolo en agua caliente por mucho tiempo–, aumenta el riesgo de que esta toxina se forme». Para evitar el riesgo «lo mejor es hacer una abertura en el paquete antes de descongelar el pescado y meterlo directamente en la nevera. Esto introduce oxígeno al paquete y evita la formación de esta toxina».

Cuánto dura el pescado en el congelador

El pescado graso, como la caballa, el salomón o el atún, pueden permanecer en buen estado en el congelador entre 2 y 3 meses, bastante menos que el pescado blanco, entre 6 y 8 meses. En lo que respecta al pescado ahumado, solo dos meses.