Los cosmonautas rusos recién llegados a la Estación Espacial Internacional
Guerra Ucrania
El desafío de tres cosmonautas rusos a Vladimir Putin
Denis Matveyev, Oleg Artemyev y Sergey Korsakov llegaron a la Estación Espacial Internacional luciendo un mono amarillo y azul, los colores de la bandera de Ucrania
Gesto de tres cosmonautas rusos contra Vladimir Putin y la invasión. Los primeros viajeros llegados a la Estación Espacial Internacional desde que Rusia atacara a su vecina han aparecido vestidos con los colores ucranianos.
Cuando las escotillas se abrieron, los rusos Denis Matveyev, Oleg Artemyev y Sergey Korsakov entraron sonrientes y flotando en la estación, con trajes espaciales de color amarillo intenso con significativos detalles azules.
El trío ruso fue recibido calurosamente a bordo y fueron abrazados por sus compañeros de tripulación, compuesta por estadounidenses, rusos y alemanes. Hay que recordar que la ISS (International Space Station, por sus siglas en inglés), es un proyecto conjunto de Rusia, Estados Unidos, Canadá, Japón y Europa.
Los miembros de la tripulación de la Soyuz MS-21 (de izquierda a derecha) Sergey Korsakov, Oleg Artemyev y Denis Matveev
Los cosmonautas habían partido desde Kazajstán en un vuelo de unas tres horas de duración.
El uniforme ruso, que es azul, por lo menos era vestido por uno de ellos en el momento del despegue, por lo que el cambio de mono ha sido interpretado como una declaración de intenciones contra el presidente de su país. «Nos tocó elegir un color», dijo con una sonrisa uno de los cosmonautas rusos más tarde.
De ser así, a buen seguro que al jefe de la agencia rusa, Dimitry Ragozin, conocido por sus bravatas, tampoco le ha sentado nada bien.
Un viaje espacial de relevo
El viaje de los tres cosmonautas estaba previsto desde hace meses como parte del relevo de tripulación en la ISS.
Tras un vuelo de poco más de tres horas, la nave Soyuz MS-21, procedente del cosmódromo kazajo de Baikonur, se acopló a la Estación Espacial Internacional.
La misión se organizó el pasado mes de diciembre, habiéndose mantenido pese a la enemistad latente entre los países pertenecientes al proyecto espacial tras la invasión de Ucrania.
La nave de regreso debe caer en Kazajistán y la recogida de los astronautas, según el protocolo habitual, estará coordinada por Rusia.
La NASA siempre ha apostado por mantener la colaboración con Rusia respecto a la Estación Espacial, pese a los múltiples desprecios del jefe de Roscosmos.
Tras un vuelo de poco más de tres horas, la nave Soyuz MS-21, procedente del cosmódromo kazajo de Baikonur, se acopló a la Estación Espacial Internacional.
La misión se organizó el pasado mes de diciembre, habiéndose mantenido pese a la enemistad latente entre los países pertenecientes al proyecto espacial tras la invasión de Ucrania.
La nave de regreso debe caer en Kazajistán y la recogida de los astronautas, según el protocolo habitual, estará coordinada por Rusia.
La NASA siempre ha apostado por mantener la colaboración con Rusia respecto a la Estación Espacial, pese a los múltiples desprecios del jefe de Roscosmos.
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