La ministra de Igualdad, Irene Montero.
Ley trans
Montero rema contra corriente: eliminará el sexo en el DNI pese a que un estudio propio no lo ve prioritario
Proponen modificar el texto actual del proyecto de ley para que la documentación administrativa y los formularios incluyan a las personas «no binarias»
La ministra de Igualdad, Irene Montero, sigue dando tumbos. La polémica ley trans ha hecho que varios partidos políticos se dividan. Uno de ellos, el PSOE, que trata de liberar tensiones rebajando algunos puntos de la reforma para contentar así a los grupos feministas del país. El último golpe lo hadado un sector del Ministerio de Igualdad que ha restado importancia a la omisión del sexo en el documento de identidad para aquellas personas que se consideran binarias.
Unidas Podemos, ERC, EH Bildu, Junts, BNG, PdeCAT, PNV, Más País, Compromis y Coalición Canaria presentaron el pasado miércoles una batería de enmiendas conjuntas a la ley trans, de la mano del colectivo de personas trans, en las que plantean, entre otros cambios, incluir a las personas no binarias o que se pueda omitir la mención relativa al sexo en documentos oficiales.
En una de estas enmiendas, a las que ha tenido acceso Europa Press, los grupos parlamentarios proponen modificar el texto actual del proyecto de ley para que la documentación administrativa y los formularios incluyan a las personas «no binarias», y para que se articulen «medidas que permitan omitir, a petición de la persona interesada, la mención relativa al sexo en sus documentos oficiales».
Este 2022 Igualdad presentó el estudio sobre las necesidades y demandas de las personas no binarias en España, que costó 15.000 euros a las arcas públicas, según Okdiario, en el cual aseguraban «garantizar un mecanismo rápido, transparente y accesible que reconozca legalmente y afirme la identidad de género con la que cada persona se identifica», así como «tener disponibles múltiples opciones de marcadores de género» en la documentación oficial.
El estudio se basa en una serie de preguntas a varias personas anónimas. Una de las principales cuestiones habla sobre la posible existencia de un marcador de «tercer género» sin requisitos médicos en documentos identificativos y formularios administrativos. Las respuestas fueron claras y se dividieron en cuatro grupos: un 33 % considera que mejorarían sus condiciones de vida; un 7 % considera que no resolvería sus principales dificultades y un 8 % cree que las implicaciones aún no están lo suficientemente debatidas.
Entre los comentarios de los encuestados hay controversia con Igualdad: «A pesar de haber marcado que estaría bien el marcador de 'tercer género', no me parece de ninguna forma correcto. Para empezar porque aumenta la creencia de que no binarismo es igual a un tercer género y no es así. El no binarismo no es ningún tercer género, a pesar de la creencia popular», comenta uno de ellos.
Líneas más abajo se puede leer otra cita: «Creo que más que añadir un 'tercer género' en los documentos identificativos y administrativos, lo que debería hacer es eliminar el género por completo. Añadir una opción de un tercer género podría generar más discriminación en la administración hacia las personas no binarias».
Tal y como expone el estudio, se ve que no hay un claro consenso entre Igualdad y las personas que no se sienten identificados con ningún género, ya que no están de acuerdo en la última incorporación en las enmiendas que Montero quiere añadir, entre las que destacan que se añada una tercera casilla en el documento de identidad y que se elimine la mención al sexo.
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