La secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez (i), y la delegada del Gobierno Contra la Violencia de Género, Victoria Rosell (d), comparecen tras la reunión del primer comité de crisis
Casi la mitad de las mujeres asesinadas este año habían denunciado a sus agresores
En este mes de diciembre negro, seis de las diez víctimas habían interpuesto una denuncia y constaban en el Sistema de Seguimiento Integral en los Casos de Violencia de Género
Este jueves fuimos testigos de una jornada negra. Cuatro víctimas de violencia de género que colocan a diciembre como el mes con más fallecidas por esta causa de 2022 y se puede colocar como el diciembre más sangriento desde que hay registros. Una evidencia clara del fracaso de las políticas de Igualdad del Gobierno de coalición, que las lleva por bandera desde que ocupan La Moncloa.
De las diez víctimas que por el momento se han confirmado este mes de diciembre, seis habían denunciado previamente a sus agresores. Una tendencia que se repite si miramos los datos anuales de este 2022: de las 48 víctimas confirmadas hasta el momento, 20 habían denunciado.
Algo que, parece ser, no fue suficiente, ya que a pesar de constar en el Sistema de Seguimiento Integral en los Casos de Violencia de Género (VioGén), fueron finalmente asesinadas.
A falta de que se confirmen varios casos susceptibles de ser calificados como violencia de género, este diciembre se podría convertir en el más sangriento para las mujeres desde que hay registros, allá por el año 2003. El dato más alto de este mes se había dado en 2008, con once víctimas, que en el último mes de 2022 podían ascender a doce.
Desde el Ministerio de Igualdad, la titular Irene Montero solo se ha pronunciado vía Twitter para condenar el incesante goteo de asesinatos machistas: «Es imposible no sentir rabia y dolor ante tantas y tantas vidas de mujeres marcadas por la violencia de género», dijo la ministra tras el asesinato de una mujer embarazada en Toledo a manos de su expareja.
Por su parte, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, defendió el sistema de protección a las víctimas, aunque reconoció que es «mejorable». Asimismo, habló de «profunda frustración» por los asesinatos sucedidos estos últimos días .
Pero la nota discordante la dio este jueves la ministra de Defensa, Margarita Robles, que pidió a Unidas Podemos «autocrítica» sobre su responsabilidad en el aumento de casos de violencia de género y señaló que a lo mejor ley 'del sí es sí' «tampoco ha dado respuesta adecuada a la situación que estamos viendo». Unas declaraciones que tuvo que rectificar horas después matizando que el Gobierno trabaja »unido y sin fisuras" contra la violencia de género.
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