La sandía española gana peso por una ola de calor letal para Marruecos

Frenazo al crecimiento de Marruecos como uno de los principales proveedores de sandía para la Unión Europea (UE).

Después de que en 2022 el vecino del sur llegase a desbancar a Italia como segundo suministrador para el bloque comunitario, Marruecos ha perdido presencia en el mercado continental en los dos últimos años. Los comercializadores magrebíes auguran una campaña de récord para este 2025; sin embargo, y pese a que los marroquíes confían en que la cosecha no peligra, las adversidades climáticas que han sacudido a diversas regiones productoras del reino han acabado con un 30 % de la fruta para exportación.

Una ola de calor con temperaturas de 45ºC ha calentado en exceso una de las superficies con mayor producción del país y ha reducido considerablemente la sandía para exportación. Según apunta el diario marroquí Rue20, la proporción de fruta exportable ha caído del 80 % al 50 %, algo que da cierto oxígenos a los agricultores españoles.

«En el campo las cosas funcionan así. Cuando unos sufren desgracias otros se benefician de ello. En España también hemos tenido problemas al principio con lluvias y calor excesivo, pero ahora estamos en un buen momento», explica en conversación con El Debate José Ángel Serrano, presidente de la Interprofesional de melón y sandía de Castilla-La Mancha.

Serrano señala la importancia del consumo interno para mantener una situación estable de precios en origen, aunque destaca el valor de las exportaciones para aupar la rentabilidad a pie de cultivo.

«Este bajón de Marruecos es muy favorecedor para los agricultores españoles porque las producciones de allí disfrutan de otras reglas de juego. Marruecos tiene costes laborales infinitamente inferiores y libertad total en cuestión de fitosanitarios para luchar contra plagas que hacen mucho daño a los europeos. Contra eso es muy difícil competir y mantener precios económicos», considera Serrano, que lamenta las reivindicaciones constantes a favor de los hábitos saludables y la vida sana «para luego consumir productos que se han elaborado con sustancias prohibidas en la UE».

Según datos de Eurostatcom (ICEX-Eurostat), en 2024 España fue principal productor de sandía para la UE con 606,52 toneladas, un 33, 36 % del total vendido en el bloque. España importó en 2024 80,35 toneladas de otros países, con Marruecos,28,65 toneladas, Senegal, 23,99, y Mauritania, 12,31 toneladas, como suministradores más importantes. En 2022, Marruecos llegó a vender 270,87 toneladas de sandía a la UE.

El dirigente de la Interprofesional de melón y sandía de Castilla-La Mancha considera «fundamental» para mantener la rentabilidad que la UE se abastezca de la sandía de España. Alemania, Francia, Reino Unido, Países Bajos, Polonia y Portugal aparecen como los mercados con mejor salida para las sandías españolas. «Es trascendental que Marruecos no nos robe cuota de mercado es estos países, donde se basa buena parte de nuestro negocio», asevera Serrano.

La proporción de sandía destinada a consumo interno y a exportación en España es del 70 % frente al 30 % a favor del primero, por lo que Serrano incide en que la situación de precios actual, de 0,49 euros el kilo en origen según el Informe de precios medios nacionales de productos agrarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, se mantendrá: «La demanda va a más. El calor es clave y creemos que el precio seguirá en esta línea. Los datos que manejamos es que va a hacer calor hasta septiembre y esos grados de más se notan posteriormente en las compras», concluye el presidente de la Interprofesional de melón y sandía.