Cerdos de raza ibérica pura en el lago de la Finca Morianillo, en Jerez de los Caballeros (Extremadura)Europa Press

La decisión de Guijuelo con el ibérico revoluciona a los jamoneros: «Es un atentado contra el territorio»

La denominación de origen salmantina cambia el juego al amparar jamones y paletas de cerdo 50 % ibéricos

La Denominación de Origen Protegida Guijuelo, la mayor en número de piezas marcadas y la más antigua, ha incendiado el sector de los ibéricos.

El sello salmantino aprobó el pasado verano su apuesta por una vía alternativa que rompe con las características innegociables que defienden el resto de gigantes de los jamones y las paletas ibéricas.

El 20 de agosto, la Mesa de Coordinación de la Calidad Diferenciada de las autoridades competentes del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Castilla y León, Castilla la Mancha, Andalucía y Extremadura, aceptó –con el voto en contra de los dos últimos– la solicitud de la DOP Guijuelo en la que modificaba el estándar de sus productos.

Antes, Guijuelo requería un mínimo del 75 % de raza ibérica para amparar jamones y paletas en su DOP; desde el 1 de septiembre, tal y como sentencia la resolución de la Dirección General de Alimentación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) ese mismo día, los jamones y paletas amparados por la denominación de Guijuelo "procederán exclusivamente de la raza porcina ibérica pura o sus cruces con la raza Duroc autorizados en la legislación nacional que garanticen un mínimo del 50 % de raza ibérica y de ganaderías que figuren en los registros gestionados por la entidad de gestión en los que podrán inscribirse todos aquellos que se encuentren en la zona geográfica definida y cumplan el pliego de condiciones».

Este nuevo escenario permite que la DOP Guijuelo amplíe el concepto de ibérico, lo que no solo ha provocado un rechazo frontal de las otras tres denominaciones de origen protegidas, Los Pedroches, Jabugo y Dehesa de Extremadura –que únicamente amparan productos 100 % ibéricos–, sino que hace presagiar una intensa guerra fratricida que ya apunta a los tribunales.

Los Pedroches ha iniciado la contienda con un «un recurso de alzada» presentado ante el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación contra la DOP Guijuelo. El reproche se fundamenta en que los cordobeses entienden que la modificación de los salmantinos crea «una situación desigual», de competencia desleal, en beneficio de los castellanoleoneses.

La maniobra de Guijuelo, además de rebajar las exigencias de raza, intensifica la densidad de producción por hectárea en la dehesa hasta los 100 cerdos, frente a los 12 que establece el modelo extensivo tradicional.

Juan Luis Ortiz, secretario general de la DOP Los Pedroches, apuntó en declaraciones recogidas por Europa Press su respeto por cualquier decisión que tome otro consejo regulador de DOP como la de Guijuelo; sin embargo, evidenció su contrariedad por las repercusiones para el ibérico nacional, y arguye no entender que desde ese Consejo Regulador se pretenda amparar como Calidad Diferenciada, como DOP, a producciones que hasta ahora sólo eran en nuestro país calidad comercial.

«Son producciones intensivas que, por definición, no tienen vinculación con el territorio y da exactamente igual donde se produzcan, seae n cualquier punto de nuestra geografía, o en Estados Unidos o China (...) Estas producciones son un atentado contra el medio ambiente y contra el territorio en el que se producen, por la cantidad de purines de cerdo que se generan por hectárea y que simplemente se vierten al terreno sin ningún tipo de control, destruyendo sin posibilidad de recuperación el suelo que soporta a la dehesa en un brevísimo espacio de tiempo», condenó Ortiz.

Los productores cordobeses aluden a que la DOP Guijuelo «cambia sustancialmente las producciones que ampara, virando hacia producciones de cerdo cruzado desarrolladas en régimen intensivo», lo que implica «producciones intensivas que van encaminadas a obtener volúmenes altos de producción en lugar de la diferenciación que nos define a las denominaciones de origen».

Junto a Los Pedroches se posiciona Jabugo, Dehesa de Extremadura y la Asociación Española De Criadores Cerdo Ibérico (Aeceriber), cuyo secretario técnico, Pablo Aguirre, ha criticado para Efe la decisión de la DOP Guijuelo: «Preocupa porque rompe el consenso alcanzado (...) Puede afectar a la confianza del consumidor y al prestigio internacional del ibérico».