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El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, durante su visita a 'El Hormiguero'

Televisión

Rajoy pide el regreso del Rey emérito en ‘El Homiguero’: «Debería estar en España»

Revela que ha pasado el coronavirus y que es partidario del pasaporte COVID

Atacó a Pablo Iglesias y Yolanda Díaz. Elogió a Ayuso. Criticó el lenguaje inclusivo. Muy relajado, y de un humor excelente, Mariano Rajoy regresó a El Hormiguero.

El conflicto Casado-Ayuso

«Ser líder de la oposición es muy difícil», dijo de Casado. De Ayuso eligió su firmeza para actuar en la pandemia. «Tiene mucho mérito. En los momentos fáciles gobierna cualquiera». «Ayuso se merece un respeto», sentenció.
¿Cuándo se acabará el conflicto entre la lideresa y el presidente del PP? «Yo tuve que tomar muchas decisiones en mi vida, y ahora no me toca tomar ninguna. De lo que sí estoy convencido es de que esto se va a resolver muy pronto y a satisfacción de todos los militantes, votantes y simpatizantes del Partido Popular», pronosticó, y volvió a sonar una gran ovación. Le preguntó Motos si maneja información privilegiada para decir eso: «No tengo ningún dato, pero tengo años y he visto muchas cosas».

El lenguaje 'inclusivo'

«Yo desde el respeto a todo el mundo, pero yo no estoy dispuesto a empezar un discurso diciendo ‘todas, todos y todes’. Porque no lo he hecho en mi vida y creo que no tiene ningún sentido», se reafirmó en su opinión sobre el lenguaje 'inclusivo'. El público recibió con aplausos su opinión.
Cree que la izquierda lo quiere imponer: «Y, sobre todo, que nos quieran imponer esas cosas, a estas alturas de la vida, sobre todo de mi vida…. Entonces yo no voy a participar en el lenguaje inclusivo».

Pablo Iglesias, el populista

«Pablo iglesias ha sido la quintaesencia del populismo», sentenció. ¿Pero al final qué ha pasado? Decía que la Constitución del 78 no valía, la Monarquía no valía, la Transición democrática no valía… No valía nada salvo lo que él y los que le seguían dijeran. ¿Y qué pasó? Pues al final se tuvo que ir. La democracia continúa, la Constitución continúa, la monarquía continúa… Oye, y todos intentamos seguir siendo lo más felices que podamos», reflexionó.
«Es un populista. Lo digo desde el respeto», remarcó.
También hubo un rejonazo para la sucesora de Iglesias en la cuota podemita-vicepresidencial del Gobierno, Yolanda Díaz, a cuenta de las declaraciones que hoy hizo presumiendo de que ella sí vio venir la pandemia: «Es un caso muy claro de política infantil. Estar en un Gobierno y decir que tú ya sabías un mes antes que estaba esto del covid y que entregaste unos papeles y que tal… Si tú lo sabías y no te hicieron caso, lo procedente era que dimitieras».
Motos planteó si, a su juicio, Abascal era otro populista. «Es distinto [que Iglesias]. No está en contra de la Constitución española, ni está en contra de la Transición. Pero yo en el libro critico algunas cosas de Vox. En primer lugar, su política de inmigración. Creo que es tremendamente injusta y creo que no se puede utilizar con fines partidistas. Critico su política europea».
¿Alejarse de Vox o acercarse a sus postulados? «Yo soy partidario de que el PP esté en el centro. «Yo no tengo nada que ver con Vox», remarcó a continuación. «Ser presidente del Gobierno es muy difícil. Estás tremendamente expuesto. Lo que yo intentaba hacer es decirme a mí mismo ´¿cuál es el interés general?’», confesó.

Juzgando al Gobierno

«Este Gobierno no se caracteriza por hacer demasiada política para adultos. Hay demasiado ‘chisgarabisero’».
¿Qué le inquieta del Ejecutivo de Sánchez? «Me preocupan muchas cosas, en primer lugar, sus socios». «Cuando alguien se coaliga con Bildu o con partidos que quieren liquidar España, pues es muy difícil llegar a acuerdos», subrayó.

Enfermo durante diez días

Reveló que ha tenido coronavirus. «He pasado el covid. Diez días. Lo hemos pasado todos en casa a la vez, y por suerte, a los diez días nos dieron el alta». Se ha vacunado dos veces y espera hacerlo una tercera.
«Si todos los gobiernos del mundo, y todas las grandes instituciones, y la inmensa mayoría de los médicos, al menos que yo conozco, te dicen que hay que vacunarse, quién es un dirigente político, sin saber una palabra de este asunto, para decir que no».
Es partidario de poner limitaciones a los que no se vacunen. Para viajar en avión, para ir a un hotel… O sea, del 'pasaporte covid'.

Incómodo con la corrupción

Motos le preguntó también por la corrupción. Ahí estuvo más incómodo y no lució sentido del humor. El discurso fue el habitual. Van algunas frases. «Las personas que han sido condenadas ya no están en el PP». «Es un partido en el que militan cientos de miles de personas». «Los casos de corrupción son los mínimos». Y en este plan, que diría Umbral.
Se paró en el ‘caso Camps’. Recordó que ocupó la portada de un diario nacional –El País, que no citó– en 120 ocasiones en tres años. Por aquello de los trajes. «Fue masacrado y no fue condenado jamás por ningún tribunal español. A la hora de juzgar hay que andar con mucho cuidado. Y los juicios paralelos son muy peligrosos. Y el honor también lo tienen los inocentes».

El regreso del Rey

«¿Lo ha condenado algún tribunal? ¿Lo ha llamado algún tribunal?», preguntó sobre el Rey Juan Carlos. «Aquí florecen los jueces por doquier», denunció.
«Parece que están las cosas al revés. Ahora están gobernando en España partidos como Bildu u otros y el Rey Juan Carlos está en Abu Dabi. Es que eso no tiene ningún sentido. El Rey Juan Carlos debería estar en España», planteó.
Habló con él antes de que se fuese. Esto le dijo: «Que si yo fuera presidente del Gobierno, yo no aceptaba esto de Abu Dabi». El Rey le aseguró que iba a volver pronto.

Más sueldo para los políticos

«Creo que –me van a poner verde– los políticos deberían tener un buen sueldo. Sobre todo a medida que tienen responsabilidades importantes. Un ministro es una persona muy importante para un país… Bueno, según en qué ministerio esté, porque hoy hay cada ministerio que es para nota».
Recordó que el Ministerio de Sanidad de su Gobierno se ha dividido ahora en Sanidad, Igualdad, Asuntos Sociales y Consumo. Y que el de Educación se ha partido «en cuatro o cinco» partes. Cree que estas decisiones no solo cuestan caras en lo económico: «Cuando no tienes nada que hacer, te dedicas a regular, a hacer decretos y eso suele ser muy peligroso», advirtió.