Albert Boadella, este viernes en la entrevista
Plano General
Albert Boadella: «Me hubiera gustado ser torero»
Pedro Sánchez «es el sinónimo de la amoralidad mayor que he conocido», sentencia el dramaturgo catalán en la televisión pública
Dice Jenaro Castro que Plano General (La 2) es un «programa de entrevistas sencillo y sincero». En realidad, es mucho más que eso. Es un oasis de libertad en la cadena pública. Y uno de esos programas de entrevistas que resisten la comparación con los de antaño. Esta noche de viernes se pasó por el espacio el dramaturgo y actor Albert Boadella. Prácticamente cada una de sus respuestas valdría como titular. Habló de política (y por extensión de Cataluña), de teatro, de la familia… También del paso del tiempo. En verano cumplirá 80 años.
El teatro y las artes
La conversación empezó con el teatro. Habló de su última obra, Malos tiempos para la lírica, que estrenó precisamente en el lugar donde se celebró la entrevista, en los Teatros del Canal de Madrid. «Son malos tiempos para las artes. Si exceptuamos la danza, que es el arte que más ha evolucionado en el siglo pasado. El resto no están a la altura que estuvieron en otros momentos. Ni la pintura, ni la escultura. Si nos imaginamos el Renacimiento, pues lo que se hace ahora es de una cierta ligereza… Se nos has perdido una parte de intensidad el arte porque el consumismo hace que cada semana se cambie el estilo, hay cosas distintas», reflexionó.
La censura de ayer y de hoy
Por la edad, se siente libre para decir lo que siente y quiere. «Yo ahora digo cosas que a lo mejor hace 40 años no me atrevía a decir y me pongo en contra, muchas veces, pues de una sociedad que hace 40 años no lo hubiera hecho. ¿Por qué? Porque en la cuenta atrás uno siempre tiene menos que perder. Cuantos más años pasen, menos tengo que perder. Lo único que puedo perder es la vida, lo tengo más cerca esto».
Pero es consciente de que, en general, no hay tanta libertad como antaño a la hora de opinar. «Hay una especie de Inquisición por parte de la sociedad. Hay una sociedad que constantemente está señalando porque se ha montado no sé qué tabús, muchísimos tabús, y cuando tocas un tabú te masacran en las redes en menos que canta un gallo». «Es una sociedad en la que la democracia sufre un cierto deterioro. Hay que hacer un renacimiento», propuso.
En su oficio, el teatral, también se siente la falta de libertad: «La censura oficial del franquismo era una cosa clara. Yo pasé 14 años actuando censurado, pero el público lo sabía. Lo que el público no sabe es que lo ve ahora en el escenario está autocensurado». «Hay unas formas de coacción que vienen a través de las subvenciones», concluyó.
Jenaro Castro y Albert Boadella, durante la entrevista, desarrollada en Madrid
Cataluña y España
«Cataluña era un territorio maravilloso que se ha autodestruido», sentenció. Pero como es una persona optimista, cree que tiene solución: «Yo confío en que haya una generación, que a lo mejor ahora tiene 8 o 10, que dirá a sus padres, a sus maestros y a los medios: ‘¿Pero qué me habéis montado aquí? Eso a mí no me interesa para nada, me estáis cortando todas las posibilidades de mi vida. En la lengua, en la cultura, en todo’. Esto seguro que sucederá así, una generación que se enfrentará a lo que ahora es el pan de cada día».
A España la definió así: «Es una cosa muy divertida porque es un caos formidable». ¿Una bandera? «La bandera española, a mí me gusta». Aunque a la hora de los lemas, prefiere los franceses: «Libertad e igualdad».
Su ideología
«No, soy un conservador, obviamente, porque estoy en la conversación de un oficio de hace 2.400 años», empezó argumentando. «Yo siempre he tratado de luchar por la libertad. La libertad en mi oficio, sí, sin duda alguna, y en lo que es la vida civil». «Yo soy claramente un hombre liberal», zanjó, antes de aclarar que no tiene políticos de referencia.
Los toros
Salió en defensa de la tauromaquia. «Yo creo que los toros es el arte más impresionante que nos ha venido desde la más remota antigüedad. Creo que es un valor que vale la pena conservar por muchos aspectos».
El dramaturgo catalán, en un momento de la entrevista
Es más, cuando Jenaro Castro le preguntó por un sueño sin realizar, su respuesta fue inmediata: «Seguramente me hubiera gustado ser torero».
El machismo
«En cuanto a las acusaciones que pueden hacerme de machismo, para mí son incomprensibles. Yo he trabajado siempre en un oficio que no conoce para nada el machismo. Es el gremio que ha sido refugio de la libertad», quiso aclarar.
La muerte y Dios
«Nadie ha vuelto después de la muerte, pero seguramente hay cosas detrás», afirmó. «¿Dios existe?», planteó el presentador. «Existe algo que ordena. Lo que no sé es quién ni cómo», contestó el dramaturgo.
Nombres propios
Jenaro Castro puso sobre la mesa una serie de nombres propios. Boadella respondió a bote pronto. Junqueras: «Es un hombre que ha hecho una vida que no tendría que haber hecho. Tendría que haber sido cura u otra cosa». Pedro Sánchez: «Es el sinónimo de la amoralidad mayor que he conocido». Núñez Feijóo: «Es la indecisión, lo que hemos visto tantas veces en el PP». Felipe VI: «Un clavo al que nos agarramos». Tabarnia: «Es un magnífico espejo para que la sociedad se vea ridiculizada»
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