Los afectados por la dana denuncian en 'MasterChef' el abandono y la falta de ayudas públicas: «Solo ha llegado la privada»

En la segunda entrega del concurso culinario, los cocinados pasaron a un segundo plano. MasterChef 13 se ha desplazado hasta la localidad valenciana de Picaña para homenajear a todas las víctimas y los voluntarios de la dana.

Además de que los participantes cocinaran como ellos en el restaurante de Ricard Camarena —con dos estrellas Michelin—, Pepe Rodríguez, Jordi Cruz y Samantha Vallejo-Nágera se interesaron por el testimonio directo de aquellos que sufrieron las consecuencias del temporal.

A la vez que agradecían a los voluntarios que se acercaron, siendo «las primeras personas que vinieron» y permaneciendo «bastante abandonados los primeros días», todos ellos coincidían en el mismo mensaje: la falta de ayudas.

Palmira Cortina, dueña de un obrador en Paiporta, señalaba que «solo ha llegado la ayuda privada». «Ha llegado enseguida», reiteraba, mientras que mostraba la marca de hasta dónde cubrió el agua su local —unos 2,5 metros—.

Lo mismo reclamaban Enrique Sirvent y Loli Perpiñá, quienes eran dueños de una heladería en la misma localidad. «Si pudiera dar algún consejo sería, de alguna manera, reducir la burocracia para que todo fuera más ágil», pedía Enrique, quien afirmaba que «las ayudas llegan despacio, las privadas un poco más rápidas».

Algunos de los concursantes también sufrieron las consecuencias de las riadas. Ana María, que vio cómo el agua entraba en su casa, perdió a «una amiga de toda la vida». Además, tanto Yago como Chema colaboraron como voluntarios. Este último llevó a cabo «una colecta», consiguiendo más de 20.000 euros, además de acercarse con sus amigos a colaborar con las víctimas de la dana.

«Que no se nos olvide»

El reclamo de las ayudas también se extendió hasta la prueba de eliminación. La chef Begoña Rodrigo, del restaurante La Salita —con una estrella Michelin— agradecía la visita. Igualmente, aprovechaba para denunciar que «no se han construido las cosas, que no están llegando las ayudas como tienen que llegar». Así, pedía que «no se les cobren nada» en un futuro a quienes las reciban.

Junto a este discurso, todos quienes presentaron su testimonio estaban unidos por otro reclamo: «Necesitamos que no se olvide».