TVE entierra 'La Familia de la Tele' y entrega su programación a Cintora, Intxaurrondo y Javier Ruiz

Audios, transcripciones, imágenes y pendrives es lo que han mostrado las televisiones durante toda la semana. El fango de la corrupción socialista ha copado los informativos, los programas especiales, las opiniones, algunas esperpénticas, de colaboradores al servicio de la causa que comienzan a desertar y saltar del barco. Lo que defienden, con fervor, es insostenible y se producen declaraciones como las de Marta Nebot, tertuliana de TVE: «No es lo mismo robar cuando se cree en el 'sálvese quien pueda' que hacerlo cuando se defiende la justicia social para tod@s».

Esta barbaridad apoya otras afirmaciones y acciones que dejan al aire lo que supondría una información veraz, imparcial. Otro detalle significativo ha sido que TVE omitió en el Telediario el cese del número tres de María Jesús Montero en Hacienda por ser una exclusiva de El Debate y porque quizás «no les interesaba dar la noticia», mientras que Antena 3 y Telecinco la destacaron… Porque era una noticia relevante.

La televisión pública oficial del sanchismo vive momentos de euforia en su programación, tras el fracaso de La Familia de la Tele, con sus dos abanderados de la información sincronizada, Javier Ruiz en Mañaneros 360 y Jesús Cintora, con Malas Lenguas. Los 'bailan' casi todos los días, por toda la programación. A Cintora, darle palos al novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid y poner en duda las actuaciones de la UCO le ha servido para «ascender». Lo han colocado en La 1 sustituyendo a la troupe de Sálvame 2. El primer día, con la comparecencia de Pedro Sánchez a las cuatro y cuarto de la tarde, la audiencia subió hasta un 13 %. Euforia. La realidad es que sin Sánchez ha caído a un 7 % de share… y todo apunta a un regreso, escalonado, a La 2, donde campa a sus anchas con un 3,5/4 %.

TVE ha convertido sus tardes en un pozo de decisiones erróneas de las que no sabe o no quiere salir. La Familia de la Tele ha sido un desastre. Ni María Patiño ni Belén Esteban querían de compañeros a Aitor Albizua e Ines Hernand, ni estos se sentían cómodos con ellas. El último día saltó la liebre, en un esperpéntico funeral egipcio. Patiño se largó del sarcófago y sentenció: «prefiero viajar sola». Desapareció y Arbizua, soltó: «Era lo que quería, no estar con nosotros». TVE ha tirado por la borda más de siete millones de euros, de dinero público, con un experimento rancio que se iba a comer el mundo. Ana Rosa Quintana lo resumió así: «Creíamos que iba a competir con el resto, pero se ha visto que es un producto Mediaset».

El resto de televisiones transitan, sin excesivo ruido, por el éxito: Antena 3 arrasa con las noticias, El Hormiguero y sus concursos. Sólo tiene un pequeño bache: lo que emiten tras el programa de Pablo Motos no funciona.

Lo contrario le ocurre a Mediaset, con sus programas en el prime time de agua e islas: Supervivientes. Estos programas aguantan a Telecinco con la media del mes por encima del 10 %. La tarde deambula en 700.000 espectadores y un 9,5 % de share con TardeAR, El Diario de Jorge y Reacción en cadena. Y los informativos en tercera posición.

La radio esta semana ha ofrecido una gran noticia: Carlos Herrera ha renovado un año más su vinculación con la COPE: «Seguiré haciendo una radio en libertad, responsabilidad y crítica», asegura. Lo va a tener difícil si quiere superar a Radio Nacional de España porque en la última encuesta flash del CIS de Tezanos, RNE era la preferida y más escuchada por los españoles (21,3 %), seguida por la SER (16,7 %), la COPE (14,5 %) y Onda Cerro (6 %). El CIS es una fábrica de «sorpresas oficiales», siempre a favor del Gobierno socialista. ¿Será verdad que lidera RNE?- La misma verdad que el PSOE arrasa en intención de voto… Este esperpento del CIS nos cuesta bastantes millones, también, del erario público.