La frase de Almodóvar a Carmen Maura que rompió su amistad: «Estás al 30 % de una buena actriz»

Lo que se vivió en el rodaje de Mujeres al borde de un ataque de nervios no fue solo ficción. Tras la cámara, Carmen Maura y Pedro Almodóvar protagonizaron un desencuentro que acabaría separándolos durante 20 años.

En el cine español ha habido parejas artísticas memorables, pero pocas tan intensas —y tormentosas— como la formada por Pedro Almodóvar y Carmen Maura. Juntos firmaron películas como Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón, ¿Qué he hecho yo para merecer esto?, Matador, La ley del deseo o la mítica Mujeres al borde de un ataque de nervios. Pero precisamente ahí, en la cima del éxito, se rompió la baraja.

Cuenta la actriz que en la primera proyección con el equipo, mientras todos celebraban el futuro triunfo, el director manchego se le acercó y, en lugar de halagos, le soltó lo que hoy es ya una frase de manual: «¿Te das cuenta de que estás al 30 % de lo que podría estar una buena actriz?». A cualquiera le habría hundido, pero Carmen, con esa retranca suya, se encogió de hombros y pensó: «Menos mal que no soy acomplejada… se ha demostrado que se equivocaba». Y razón no le falta: la película arrasó y su interpretación quedó para la historia. Aquel comentario dejó cicatriz y la relación saltó por los aires.

Veinte años de distancia, silencios y carreras separadas. Hasta que en 2005 sonó el teléfono: Almodóvar quería a Maura para Volver. El papel era jugoso en concepto —el fantasma de una madre que regresa a ajustar cuentas—, pero escuálido en recorrido. Aun así, ella aceptó, quizá porque la vida es demasiado corta para peleas eternas. El reencuentro fue cordial, aunque poco idílico. Almodóvar decía esto en el documental Ay, Carmen: «Pensé que iba a poner más problemas con ese look, tan envejecida y con el pelo cano…». Y ella, con ironía, respondía años después: «Él estaba súper ocupado con Penélope (Cruz)».

Tras Volver, nada más. En 2012 Carmen fue tajante: «No creo que vuelva a trabajar con Almodóvar. Sus rodajes son tensos y no me apetece». Y Agustín Almodóvar, hermano y productor, le contestó en redes: «Tranquila, no pensamos llamarte». Ni reconciliación ni amagos, cada uno por su camino. En ¡Ay, Carmen! (2019), la actriz cerraba el tema con un zasca elegante: «A mi representante le encantaría que volviésemos a trabajar juntos y a algunos fans también, pero a nosotros dos no».

Lo cierto es que, con o sin Almodóvar, Carmen Maura ha escrito una de las trayectorias más sólidas del cine español. Más de 160 títulos, premios en Cannes, San Sebastián, cuatro premios Goya (incluido el de mejor actriz por Mujeres al borde de un ataque de nervios), un Platino de Honor y el reconocimiento unánime de críticos y público. Ha trabajado con Álex de la Iglesia, Carlos Saura, Pilar Miró, Mario Camus, Francis Ford Coppola y un largo etcétera que haría palidecer a cualquiera. Francia la adora, Latinoamérica también, y en España la seguimos considerando la gran dama de la naturalidad frente a la cámara.

Este lunes 15 de septiembre Carmen Maura cumple 80 años, redondos y gloriosos. Y lo celebra presentando Calle Málaga, en la que se desnuda sin complejos: «Lo del desnudo es que ahora me da igual, ya soy mayor». La intérprete nunca quiso ser actriz, pero el destino le tenía preparada una vida de cine, con sus luces y sus sombras. La gran dama del cine español lo resume mejor que nadie: «Ser actriz me ha salvado de volverme loca». Y a nosotros, como espectadores, nos ha salvado del aburrimiento durante cinco décadas. Que Almodóvar diga lo que quiera: la madrileña es y será siempre mucho más que un 30 %.