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29 de marzo de 2024

Portada de «John Senior y la restauración del realismo» de Francis Bethel

Portada de «John Senior y la restauración del realismo» de Francis BethelHomo Legens

'John Senior y la restauración del realismo': el promotor de las Humanidades que logró vocaciones religiosas

Francis Bethel, discípulo de John Senior, relata la vida y génesis de su pensamiento, centrado en la decadencia de la civilización cristiana y en su remedio a través de la razón y el amor a los clásicos

Este año se cumple un siglo del nacimiento de John Senior. Hasta hace una década, este profesor de universidad estadounidense era un desconocido en España. Gracias a Natalia Sanmartin Fenollera y su El despertar de la señorita Prim (Planeta, 2013), se empezó a conocer a Senior: él había impulsado un programa de humanidades centrado en la lectura de los grandes autores clásicos, dentro de un canon que partía de Homero y que la tradición acrecentaba hasta nuestros días. La hondura de estos estudios produjo un notable cambio en muchos de sus alumnos, bastantes de los cuales se convirtieron al catolicismo e incluso tomaron hábitos. Varios acabaron como obispos y otros como monjes. En el caso de este libro, hablamos de un benedictino —no es casual la Orden de San Benito— que fue discípulo suyo en la Universidad de Kansas, donde estuvo entre 1971 y 1974.
Sin duda, esta extensa biografía de Senior —aquí se nos cuenta de primera mano lo que no podemos observar en La muerte de la cultura cristiana (1978) y La restauración de la cultura cristiana (1983)— será del agrado de quienes conozcan las tesis de este autor, e incluso estén atentos a la influencia que en él ejerció Mark Van Doren. Senior pensaba que la civilización cristiana se hallaba en una fase de decadencia motivada por varias razones —dicho con palabras de Natalia Sanmartin, este es «un mundo desolado que ha dado la espalda a Dios y se ha vuelto a los ídolos», como se lee en el prólogo español—, una de las cuales era el apartamiento del cristianismo de su raíz.
Portada de «John Senior y la restauración del realismo» de Francis Bethel

homo legens / 678 págs.

John Senior y la restauración del realismo

Francis Bethel

Según Senior, lo relevante de una cultura y una civilización era su raíz, aquello a partir de lo cual se despliegan todas sus facetas. En opinión de Senior, el corazón del cristianismo es la misa. A partir de la misa, y yendo de la mano de María, se va desarrollando todo: para la misa hace falta un altar, que es el centro, y un sagrario, que también se halla en el centro. En torno al altar, un presbiterio, y luego naves, muros, tejados, vidrieras… Su planteamiento era orgánico y ascético —en esta biografía hallaremos un capítulo dedicado a la «gimnasia y la música de la cultura cristiana» y a la «restauración de la inocencia»—, con una pasmosa atención a las letanías del rosario. Senior paladeaba las letanías y, a través de ellas, era capaz de explicar conceptos esenciales de civilización, cultura y religión, conceptos bien integrados en el pensamiento de Senior.
Como en las anteriores ediciones de Homo Legens de las obras de Senior, este libro cuenta con prólogo de Natalia Sanmartin Fenollera —ella fue la impulsora de las traducciones al español de estas dos obras—, que bien conoce al benedictino Francis Bethel, y define a Senior como un hombre que abría puertas. Un hombre que «abrió puertas, las abrió de par en par, ayudó a sus alumnos a cruzar los dinteles de una gruta atestada de tesoros, la cueva que guarda lo mejor de lo escrito y pensado por los grandes autores de la historia, por los sabios, los poetas y los santos».
Sin embargo, no es esta una mera biografía de datos y anécdotas acerca de una vida, la de John Senior. El libro es voluminoso porque describe el mundo del siglo XX tal como lo vivió y contempló Senior. Por tanto, ayuda al lector a entender la génesis de sus planteamientos e iniciativas, e incluso supone una invitación para reflexionar acerca de un largo número de faceta de nuestra vida y de nuestra sociedad. ¿Son facetas que han surgido a partir del despliegue de la raíz cristiana? No en vano, el título impele a un cambio, no a una mera lamentación.
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