Pablo del Río junto a Ray Zapata tras la consecución de la medalla de plata en los últimos Juegos Olímpicos de Tokyo 2020
Pablo del Río, psicólogo deportivo: «Rafa Nadal es superior mentalmente a cualquier deportista»
Se trata de uno de los pioneros de la Psicología Deportiva en España, que lleva ayudando a deportistas de élite desde hace más de tres décadas
Pablo del Río llegó en 1990 al Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Madrid. Allí le recibieron con recelo. Tanto es así que, cuando los deportistas tenían sesión con él, nunca decían que iban al psicólogo: «Voy al médico» o «al fisio» eran las excusas más utilizadas. Del Río, uno de los pioneros en tratar la salud mental en el mundo del deporte en nuestro país, reconoce que los entrenadores le miraban «con recelo porque cuestionábamos sus métodos». Hoy, por suerte, reconoce que «no existe el tabú de antes» ante la salud mental y presume de tener su despacho lleno de medallas y fotos de aquellos deportistas a quien ayuda desde hace más de tres décadas y con siete Juegos Olímpicos en su haber.
–¿Qué ha pasado en los últimos tiempos para que la salud mental entre los deportistas de élite esté tan presente en los últimos tiempos?
–Yo creo que lo que está presente es en los medios de comunicación, porque en los deportistas está presente desde hace más de tres décadas. Yo llevo más de 30 años trabajando con deportistas de alto nivel y el trabajo va dirigido a mejorar el rendimiento, a mejorar sus prestaciones, pero lógicamente para que eso suceda también tenemos que lograr que el deportista tenga un equilibrio y una buena salud mental.
A veces se crean grandes personajes sin darnos cuenta de que lo que hacemos es perjudicarles
–¿Y qué ha pasado según, su experiencia, para que los medios de comunicación ahora estemos tan atentos a este problema?
–Yo creo que esas decisiones de deportistas, diciendo y recordando a la sociedad que son personas, ha hecho a todo el mundo el reflexionar y bajar del pedestal a deportistas. Demuestran que son personas y tienen emociones, tienen familia, tienen vida propia y que, lógicamente, sufren, padecen, se esfuerzan, igual que el resto de personas, con la diferencia de que los deportistas de alto nivel tienen que estar preparados para dar lo máximo en cada momento.
–Irene López, jugadora española que a los 20 años ha dejado el fútbol tras ganarlo todo reconoció que la salud mental es un tema tabú a día de hoy, ¿está de acuerdo con ella?
–En absoluto. Antes sí, pero ahora no. Cuando yo comencé, en el año 90 en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid, cuando el deportista iba a verme y les preguntaban «¿Dónde vas?» Decían que «al fisio». Nunca decían que iban al psicólogo. Pero eso era hace 32 años. Si tú hoy entras en mi despacho ves un montón de fotografías y medallas. Además, animan a compañeros que lo están pasando mal a que acudan a verme. Al final los deportistas son personas.
El problema es que muchas veces, desde los medios de comunicación y desde las autoridades político-deportivas, se crean grandes personajes sin darse cuenta de que son humanos. Y al crear esos personajes lo que hacemos es perjudicarles porque se generan unas expectativas en el sentido de no poder fallar. A veces, como lógicamente la mayoría de los deportes, hay un esfuerzo y un trabajo físico. Hay fatiga, hay molestias físicas, hay, incluso, dolor. Entonces, aprender a convivir con todas estas situaciones que en principio parecen adversas y negativas también forma parte de esa salud mental.
Antes la salud mental era tabú, hoy no
–Andrés Iniesta, Carolina Marín, Simone Biles, la mayoría de ellos sufrieron problemas de salud mental cuando habían alcanzado el punto álgido de sus carreras
–Yo entiendo que los problemas pueden darse en cualquier momento del proceso evolutivo de la persona o del deportista. Cuando un joven es seleccionado para un centro de alto rendimiento sale de su medio ambiente familiar, de su ámbito académico, social y se incorpora a un medio que desconoce totalmente. Si ese joven llega a ese centro sin la preparación, sin la información y sin el apoyo necesario para saberlo manejar los tiempos, puede sufrir.
La diferencia entre el que está preparado psicológicamente y el que no lo está es que la presión unos la ven como una amenaza y otros la ven como un reto. Y en eso Rafa Nadal es un ejemplo. Yo hace once años ya dije que Rafa es superior mentalmente a cualquier otro deportista y me reafirmo.
–¿Qué porcentaje de deportistas con patologías de salud mental has podido tratar?
–Yo te diría, tras 30 años trabajando con deportistas, que un 1 %. Tengo muy poquitos casos de patologías serias. Lo cual no quiere decir ser que alguien tenga en un momento un ataque de ansiedad, un momento de estrés en momentos puntuales, lesiones... ¡Pues claro que los hay! Lo que pasa es que quién está entrenado y tiene las herramientas para afrontar esas situaciones le van a afectar mucho menos que el que no lo está. E incluso, Muchas de estas depresiones no están diagnosticadas, sino que es el propio deportista o el entorno familiar el que dice que el niño a la niña tiene depresión. Yo diría que las personas que hacen deporte son personas bastante más saludables que la población normal que no lo practica.
La diferencia entre el que está preparado psicológicamente y el que no lo está es que la presión unos la ven como una amenaza y otros como un reto
–Hablabas de Rafa Nadal. ¿Qué porcentaje crees que hay de trabajo y de algo innato en esa fuerza psicológica para sobreponerse ante situaciones deportivas y personales tan adversas?
–Yo estaba con un amigo viendo la final del Open de Australia y me decía «esto ya ha acabado». Me acuerdo que le dije: «Si se tratase de otro deportista te diría que sí, pero con Rafa nunca se ha acabado hasta la última bola». Y así fue. Fue un partido épico y un partido en el que demuestra cómo los dos los jugadores son capaces de sobreponerse a situaciones adversas, porque ambos jugadores están acostumbrados a ese tipo de batallas, a ese tipo de tensión, ese tipo de presión.
No sabría decirte con exactitud qué porcentaje es innato y qué porcentaje es trabajado. Pero, evidentemente, desde el entorno familiar, desde el entorno técnico, desde el entorno médico, es decir, todo eso en el caso de Rafa está muy bien planificado y hace que él se dedique a lo que tiene que hacer, que es jugar al tenis.
–¿Es Rafa Nadal el mejor ejemplo de cómo se tiene que trabajar la salud mental?
–Pues yo no me atrevería a asegurarlo, pero lógicamente yo creo que es un ejemplo de trabajo, de esfuerzo, de constancia y de superación. Pienso que Rafa Nadal tiene muchísimos valores y es una referencia para todos y cada uno de los deportistas. Yo, que vengo del mundo del tenis, para mí, Nadal es mentalmente superior a cualquiera, y eso ya es una realidad y el tiempo me ha dado la razón.
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