Alejandro Blanco, presidente del COE, da la medalla a Sete Benavides
Sete Benavides recibe el bronce olímpico que el dopaje le quitó en 2012
El piragüista terminó cuarto en los JJOO de Londres, pero el segundo había competido dopado
Sete Benavides ya tiene su medalla olímpica, esa que se le escapó deportivamente por muy poco en Londres 2012 cuando en la prueba de piragüismo C1 200 entró en la línea de meta cuarto. Aquella carrera tenía trampa y es que el lituano Jevgenij Shuklin, que terminó segundo, había competido dopado.
Así, este miércoles el Comité Olímpico Español (COE) le ha dado a Benavides su merecida medalla de bronce, la que le corresponde una vez que el piragüista fue descalificado por dopaje. El presidente del COE, Alejandro Blanco, ha entregado la medalla al deportista mallorquín, que en un bonito acto de reconocimiento también ha recibido el diploma que le acredita como medallista de los Juegos Olímpicos de 2012.
Con los acordes del himno olímpico se hace así justicia con un deportista que compitió en Londres con 21 años y que entonces rozó la medalla. En la carrera se colocó en su inicio segundo, pero después cedió ante el 'tramposo' Jevgenij Shuklin que se llevó la plata (ya retirada) y el ruso Ivan Shtyl, que consiguió un bronce que ahora se convierte en plata.
Sete Benavides se quejó entonces de que el viento que soplaba le había molestado, pero no había sido ese el gran problema. Uno de sus rivales estaba dopado, algo que se supo siete años después.
"Hoy te damos una medalla que realmente habías ganado en Londres hace casi 10 años. La gente que estropea el deporte te ha quitado la gloria del momento. El reconocimiento llega tarde pero no por eso es menos reconocimiento”, le ha dicho Alejandro Blanco a Benavides en este acto celebrado en Madrid.
Otra medalla más que se gana (y entrega) años después
Benavides es el tercer deportista español en poco tiempo que recoge su medalla años después de ganarla, readjudicada tras la descalificación por dopaje de otras competidores. Antes que él lo hicieron el atleta Manuel Martínez en 2013 y la halterófila Lidia Valentín por partida doble en 2018 y 2019. Y falta una cuarta, ya que a la atleta Ruth Beitia le concedieron ya el bronce de Londres 2012, que en principio se le será entregada el próximo mes.
Los Juegos de Londres 2012 fueron, además de unos de los mejores de la historia, los más sucios. Solo nueve participantes dieron positivo durante la competición, pero una década después eran 139 los descalificados, 39 de ellos medallistas, 13 de ellos de oro
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