La fea lesión de la estrella de los Pacers que marcó la final de la NBA

Tyrese Haliburton, estrella de los Indiana Pacers, se retiró lesionado del séptimo partido de las finales de la NBA. En el partido más importante de toda la temporada, el base norteamericano se marchó a los vestuarios con visibles gestos de dolor a falta de 4:55 para el final del primer cuarto del último partido de las Finales de la NBA ante los Oklahoma City Thunder.

Los Pacers informaron poco después que Haliburton no podría volver a jugar la final que se disputó en el Paycom Center de Oklahoma City debido a una lesión en la «parte baja de la pierna derecha». Haliburton cayó solo al suelo cuando tenía el balón y empezó a golpear con sus manos el parqué con llantos en su rostro. Rick Carlisle, entrenador de los Pacers, pidió un tiempo muerto y los jugadores de Indiana rodearon a Haliburton, que seguía tendido en el suelo.

Minutos después, la estrella de los Pacers abandonó la pista con ayuda, una toalla sobre la cabeza que le cubría el rostro y sin poder apoyar el pie derecho en el suelo. El marcador en ese momento era 16-16 y Haliburton había anotado 9 puntos, con un 3 de 4 en triples. Todo parece indicar que se trata de una rotura del tendón de Aquiles, una lesión grave que le llegó en el peor momento posible.

Haliburton arrastraba una lesión en la pantorrilla derecha desde el segundo partido de las Finales. En el quinto, sufrió una caída parecida a la de hoy, aunque volvió a la cancha tras retirarse al vestuario para seguir disputando el encuentro. «Si puedo caminar, quiero jugar», dijo Haliburton al finalizar ese quinto partido.

Antes del sexto partido, medios estadounidenses informaron que, de no tratarse de las Finales, los Pacers tendrían a Haliburton varias semanas apartado de las canchas. Haliburton ha sido clave para los Pacers en todos los playoff, con jugadas decisivas e imprevisibles que llevaron a su equipo a estar disputando el título de la NBA contra todo pronóstico.