El belga Eden Hazard junto al estonio Maksim Paskotsi en el partido que les clasificó para Qatar 2022
Expediente Hazard: cuando la mente bloquea al crack
El belga no mejora su situación esta temporada con Ancelotti. Con 54 encuentros de 119 posibles, el extremo ha participado en 12 tantos: cinco goles y siete asistencias en dos años y medio
El jugador número cinco del mundo hace cuatro años, y número uno para el Real Madrid cuando le fichó en el verano de 2019, Eden Hazard, vive la etapa más horrible de su carrera: relegado al banquillo en el club blanco y cuestionado en su selección, donde aunque va convocado ya no es intocable.
Lo que resume a la perfección su momento actual es el fallo que tuvo en el primer partido de Bélgica contra Estonia. El centrocampista se quedó solo ante el portero Igonen tras un pase realmente bueno de De Bruyne, pero que el madridista no supo definir como hacía hasta hace unas temporadas.
Los números no mienten
Eden Hazard se coló en el ranking de contrataciones más caras de la historia del club blanco y de Florentino como presidente. Está el primero por delante de Bale (101 millones de euros), CR7 (94 millones), Zinedine Zidane y la famosa servilleta (77 millones de euros), el colombiano James Rodríguez (75 millones), el brasileño Kaká (67 millones), el primer fichaje de Florentino, Luis Figo (60 millones), el joven Luka Jovic (60 millones) y el defensa central Eder Militao (50 millones de euros).
El 26 de noviembre de 2019, Meunier lesionaba a Hazard y causaba una concatenación de eventos negativos incalculables para el jugador y el club blanco. Más de un año y medio de recuperación, de pérdida de sensaciones, de miedos y frustraciones... La irregularidad de Hazard le ha llevado a jugar once partidos de los dieciséis disputados esta temporada por el Real Madrid con un total de 415 minutos de los 1440 totales: lo que le deja en un pobre 29 %. Con Bélgica juega la mitad de los minutos posibles, de un total de 630 minutos repartidos en siete encuentros, ha disputado 314 en cinco partidos.
Ni Bélgica es ya su oasis particular, porque incluso su seleccionador Roberto Martínez, le liberó de jugar el segundo encuentro con Gales al tener, en principio, la clasificación al Mundial asegurada.
Cuando el jugador se encuentra mal psicológicamente, su rendimiento desciende y aumenta el riesgo de producirse una lesión muscular
En el inicio de la temporada Ancelotti apostó por el belga en su once titular pero, según iban pasando las jornadas, fue desapareciendo paulatinamente hasta ser un habitual del banquillo. Primero Vinicius y Rodrygo le adelantaron por las bandas y después llegaron Valverde, Lucas Vázquez y Asensio, poniendo su situación en alerta roja. Hasta el momento lleva cinco goles y nueve asistencias en 54 partidos a lo largo de casi dos temporadas y media, pobre bagaje para un crack.
Primero Roberto Martínez en la previa del primer partido dudó de que Eden Hazard pudiera jugar los noventa minutos completos. Después en el partido contra Estonia no estuvo brillante y falló un tanto cantado. Luego tras la clasificación belga a Qatar, el seleccionador liberó a Courtois y al medio del siguiente partido contra Gales. Además el entrenador español dijo sobre el madridista: «Está en un momento futbolístico triste».
Lo que opinan los psicólogos
El 7 blanco acudió a Valdebebas a entrenarse en su día libre cuando saltó en los medios y en la concentración belga la sospecha sobre su estado de forma. De hecho, su compañero de selección Axel Witsel reveló lo que hablaron con Roberto Martínez tras la marcha del centrocampista: «Hazard no estaba lo suficientemente en forma como para jugar dos partidos. Eso es lo que nos ha dicho Roberto Martínez».
La psicóloga Laura Panzano, de El Prado Psicólogos, indica que un jugador de la categoría del belga vive «una situación de estrés, donde el jugador debería hacerse un checking de su situación personal, sus límites, y el lugar donde está y hasta dónde puede llegar. Porque una situación continuada de estrés y tensión te puede llevar a caer o sucumbir a esa presión y desbarajustarse». Lo cual nos lleva a los últimos dos años y medio del 7 blanco: «Tanto forzar el cuerpo o la 'máquina' y sobreexigirte suele hacer que llegue la lesión».
Christian Benteke explicó el nuevo papel en la vida deportiva de su compañero:«Eden tiene un historial de lesiones importante. Ahora, como es normal, evita más el contacto en su juego. Cuando tienes un pasado así, subconscientemente piensas en ello. No obstante, no es por eso que ya no regatea 5 o 6 jugadores por partido. No necesita hacer eso para hacer un buen partido. Ahora se mueve más inteligentemente en el campo».
Lesiones, falta de confianza y de continuidad que lastran a un futbolista que dejó el Chelsea como estrella mundial y que ahora vive el momento más bajo de su carrera. Se ha perdido 58 encuentros por lesión y solo ha jugado el 45,4 % de los partidos desde que llegó a la capital de España, en los que ha sumado cinco goles y nueve asistencias. Laura Panzano identifica el caso porque «hay que tener en cuenta que si vienes de una lesión grave o lenta en la recuperación, juegas con miedo, no estás conectado con la realidad (...). La cabeza no está en su sitio y no juegas con libertad». Un jugador de la talla de Eden, debe estar «conectado con él y sus necesidades, no dejarse embaucar por la presión y el entorno hostil: goles, juego, triunfar y que te recuerden lo que han pagado por ti o cómo eras antes».
Cuando alguien está muy estresado pierde el foco en quién es él
La psicóloga Laura Panzano indica que «en el caso de los deportistas de élite, los que pertenecen a grandes clubes, tienen una presión social muy fuerte: de los aficionados, del propio equipo, que es una empresa, lo que engloba, incluso cambiar de ciudad con la familia, además de la del propio jugador». Todo ello, dice la experta en psicología deportiva, lleva a estos profesionales «a una situación de estrés y necesita herramientas para sobrellevarlo».
Como indica la psicóloga, «cuando alguien está muy estresado pierde el foco en quién es él. Prevenir es tener un control de activación, de pensamientos, el control sobre cuáles son sus límites, lo que llamamos en psicología 'control atencional' y enfocarse en él y no en el entorno».
Preparar cuerpo y mente
Para la psicóloga deportiva Lorena Cos, toda preparación física debe incluir una mental, porque es igual de importante. «El estrés puede influir en la vulnerabilidad integral del deportista y, como todos sabemos, los deportistas profesionales están expuestos a una gran exigencia que si se convierte en presión puede generar una amenaza importante».
e preguntamos por el caso hace años de Robben y el actual de Hazard y responde la psicóloga que «las emociones pueden influir en las lesiones. Cuando el jugador se encuentra mal psicológicamente, su rendimiento desciende y aumenta el riesgo de producirse una lesión muscular».
Prevención del estrés
Según la psicóloga deportiva Lorena Cos, hay unas pautas y una guía de prevención esencial para los deportistas de élite. El estrés tiene un origen psicológico, pero su impacto es psicofísico. Todo lo que pasa en nuestro cerebro, se somatiza en nuestro cuerpo. Cuando los deportistas pasan por un periodo de estrés, lo primero que se encuentran entre otras cosas es una excesiva tensión muscular, y eso genera más probabilidad de que se puedan contracturar. También identificamos que disminuye la atención y la concentración, por lo que es fácil que observemos más despistes que pueden terminar en caídas.
¿Qué ayuda?
• Mantener una actitud positiva
• Establecer nuevos objetivos reales y progresivos
• Ajustar las expectativas
• Controlar las respuestas emocionales
• Desarrollar rutinas similares a antes de la lesión
¿Qué ayuda?
• Mantener una actitud positiva
• Establecer nuevos objetivos reales y progresivos
• Ajustar las expectativas
• Controlar las respuestas emocionales
• Desarrollar rutinas similares a antes de la lesión
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