La frustración de Lewandowski es también la de su Barcelona
El Barcelona proclamó una «nueva era» en el fútbol que derivó en dos eliminaciones y una goleada del Madrid
Cuando en el mes de enero ganaron la Supercopa de España –un trofeo importante pero el de menor importancia de todos los que se juegan en una temporada– el Barcelona habló abiertamente de «una nueva era». Utilizaban la frase de Ronald Araújo, su mejor jugador este curso, que iba exclamando cuando ganaron al Real Madrid en Arabia Saudí.
Por ganar una Supercopa de España, el barcelonismo ya habló de «nueva era». Es decir, que la anterior, comandada por el Real Madrid, había terminado. Eso era por una simple victoria en un título menor totalmente merecido pero que no indicaba nada en el transcurso de la temporada.
Tanto es así que desde que el Barça proclamó que ya había «una nueva era» en la que ellos estaban en cabeza han sido eliminados de Copa del Rey por el Real Madrid y de la Europa League por el Manchester United. Y es que esa era de dominio culé ya empezaba con el Barça fuera de la Champions, curiosa manera de querer dominar el fútbol. En los dos grandes enfrentamientos que tuvieron acabaron eliminados.
Bien es verdad que el equipo de Xavi Hernández tiene ya encarrilada la Liga, torneo de vital importancia que no perderán salvo hecatombe jamás vista en la historia de la competición. Tienen 12 puntos de ventaja sobre el Madrid y más allá de alguna que otra equivocación arbitral a su favor, son justos campeones. Fueron los más regulares e hicieron del 1-0 una forma de afrontar el torneo para ganarlo.
El Barcelona ha caído eliminado de Copa y Europa League después de que proclamaran esa supuesta «nueva era»
Eso sí, ganar una Liga no es para definir que empieza «una nueva era» y más cuando el que domina la supuestamente anterior está en la final de Copa, te ha ganado por 0-4 en tu estadio y además está en cuartos de la Champions League, ronda a la que ni siquiera se acerca que el equipo que manda en esa supuesta «nueva era».
El dardo de Ceballos
Esta breve frase viene ahora a colación porque Dani Ceballos le mandó un recado al Barça el pasado miércoles en el Camp Nou. Cuando la expedición blanca abandonó el estadio azulgrana tras la histórica goleada, el futbolista sevillano lo gritó. Estaba claro que él tenía en mente aquella definición que hizo el Barça del fútbol actual y que claramente ha quedado en un simple tuit con el que contentar a la afición. De realidad no había nada.
El choque de Copa del Rey puso de manifiesto que esa distancia de 12 puntos será real a nivel clasificatorio, pero a nivel deportivo nada indica. Cabe recordar que el que está por encima solo está vivo en una competición y fue eliminado en la primera ronda de Champions y Europa League y el que está a esos 12 puntos es finalista de Copa y cuartofinalista de Champions. Al menos habrá que esperar a final de temporada para saber si se puede debatir si hay un cambio de liderazgo en el fútbol español. Por ahora, no.
Reconociendo el buen hacer del Barça de Xavi en Liga, jamás podrá haber «una nueva era» liderada por un equipo eliminado en primera ronda de Champions. Es imposible. Como tampoco puede haberla cuando ese supuesto conjunto que ya lidera pierde de forma estrepitosa en su estadio aún teniendo ventaja en la eliminatoria. El Barça ahora no está por encima del Madrid a nivel global. No hay cambio de ciclo en el fútbol español.
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