Laporta y Roures, cuando estaban las obras del nuevo emplazamiento del Barça
Joan Laporta hace de Jaume Roures un futbolista más del Barcelona
El productor catalán, figura clave en el independentismo mediático y salvador siempre del Barça, aparece en la pretemporada como si fuera un jugador más
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Que Jaume Roures, productor audiovisual, socio de Pablo Iglesias, es un culé declarado es algo que todo el mundo tiene claro. Aficionado del Barça, uno de los hombres que impulsó el independentismo a través de su fuerza mediática en Cataluña es ya más que un simple hincha azulgrana. Es algo más.
Este lunes, en el inicio de la pretemporada del Barça, entre la llegada de los futbolistas a la Ciudad Deportiva apareció él, el salvador, el hombre que da aire a Laporta cada vez que vienen mal dadas. Entre el regreso de Pedri, Araujo, Marcos Alonso o el entrenador Xavi apareció también Jaume Roures.
Como si de un futbolista más de la plantilla se tratara, el productor que hace de muchas cosas en el día a día de España (igual se lleva un contrato público en TVE que financia CanalRed, la televisión de Pablo Iglesias, que controla gran parte del fútbol) es una figura clave para entender este Barça.
Roures es omnipresente. Con su poder en Cataluña (y también en el resto de España) ha utilizado sus tentáculos mediáticos para dar esa imagen alegre y amable de un Barça que se abraza a él como el socio principal. Laporta le debe mucho a Jaume, tanto como que si la temporada pasada grandes fichajes pudieron ser inscritos (y no unos cualquieras: Lewandowski, Raphinha y Koundé) fue porque él puso un dinero in extremis para que eso fuera posible.
El hombre palanca
Concretamente fueron 100 millones por la compra del 24,5 % de Barça Studios, que vino a ser la cuarta y última palanca del pasado verano, una inversión para la que el Barça no encontraba comprador. Ahí apareció de forma urgente Roures y salvó a Laporta de lo que hubiera sido el mayor fracaso y ridículo.
Jaume Roures, en una imagen de archivo
El empresario, con su poder mediático, ayuda al Barça siempre que le necesitan. Por ejemplo en pleno caso Negreira ocultó a través de Mediapro, su productora, la protesta que en el estadio de San Mamés se hizo contra los culés. Ni una imagen emitió de la lluvia de billetes con la palabra «mafia» que se produjo en el estadio de Bilbao.
Roures siempre ha estado muy ligado al FC Barcelona y a Laporta en concreto. Los negocios son constantes, el último el de darle también a Roures el nuevo museo del club, movido de sitio por las obras en el Camp Nou. Cabe recordar que el productor puso también 30 millones de euros en avales para que Laporta pudiera ser investido presidente de la entidad catalana, algo que tuvo en duda al no contar con el dinero suficiente para ello.
Clave en el independentismo catalán (él daba todos los altavoces posibles), lo llamativo ahora es que a la vez que los jugadores y cuerpo técnico del Barcelona volvían al trabajo tras las vacaciones, por la Ciudad Deportiva también apareció Roures, más importante para el Barça en estos dos años de presidencia de Laporta que mucho de los futbolistas que allí estaban. Y hay que destacar que este hombre es también el dueño de la producción audiovisual de los partidos de Primera División, esa en la que se ocultan imágenes para no perjudicar a su querido Barça.
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