Joan Laporta, en el palco del Camp Nou, en una imagen de archivo
El motivo por el que Laporta se puso a tirar bandejas de canapés en el último partido del Barça
El nerviosismo en el barcelonismo es total tras un nuevo tropiezo, el firmado ante el Granada el pasado domingo
Frenkie de Jong, la brújula que orienta a Xavi en tiempos de mediocridad
El Barcelona vive una crisis no solo deportiva, también institucional. Tras la debacle del mes de enero, en la que perdieron dos títulos por goleada (Supercopa ante el Real Madrid y Copa ante el Athletic) y se alejaron de otro más (están a diez puntos del liderato en Liga), el Barça vive en el alambre a la espera de la eliminatoria de Champions ante el Nápoles.
Con un nerviosismo total, Joan Laporta protagonizó el pasado domingo una escena muy comentada en Barcelona. El presidente culé, según desveló Catalunya Ràdio, tiró alguna bandeja de canapés del palco del estadio de Montjuic cabreado por lo que estaba pasando ante el Granada. Así, Laporta se llevó un buen cabreo y empezó a tirar estas bandejas con canapés que se dan en los palcos como obsequio y comida para los invitados.
Ahora, tres días después de aquello, se ha desvelado el motivo por el que Joan Laporta hizo eso. Además del resultado, que fue muy malo (empató ante el Granada, penúltimo en la Liga), el máximo dirigente azulgrana tuvo ese comportamiento porque las críticas de los culés ya se empiezan a dirigir a él.
Y es que ya sin la red de Xavi, que deja el club a final de temporada, ahora muchos aficionados miran a Laporta y su gestión. Y eso es lo que ocurrió en ese duelo ante el Granada. Varios culés –tampoco una gran mayoría– se dirigieron al palco a criticar a Laporta, al que señalaron como culpable de la «vergüenza» que estaban viviendo. Hubo gritos de «Laporta dimisión» durante varios minutos, aunque fueron minoritarios entre la afición.
Y ese fue el motivo por el que Laporta se cabreó tanto en el palco que tiró bandejas de canapé en el palco, ha añadido ahora Catalunya Ràdio en el programa Tot costa. Joan se cabreó mucho al ver que sus aficionados ahora le señalan a él tras tres años de presidencia en la que se presentó como un salvador y tiene al equipo peor de cuando llegó.
Comentarios
