Cristiano habla por primera vez sobre su salida del Real Madrid: «Quería una motivación diferente»

No es muy dado Cristiano Ronaldo a conceder entrevistas y menos tan extensas. En cambio, el portugués ha hecho una excepción con su íntimo amigo Edu Aguirre y ha hablado durante una hora con él sobre su carrera deportiva, su estancia y su salida en el Real Madrid o también la rivalidad sana que tuvo durante una década con Leo Messi.

'CR7' charló tranquilamente en el programa llamado Los amigos de Edu, que lo emite La Sexta, y allí hablaron de todo lo que ha vivido Cristiano durante su carrera, empezando por el final, con su marcha a Arabia Saudí. «Me está gustando mucho, me siento muy bien con mi familia aquí. Soy una persona de desafíos, de cosas nuevas. No me intimidan los grandes retos. Sabía como era la liga de aquí por los muchos portugueses que habían jugado»

Una liga que Cristiano Ronaldo ha dicho en varias ocasiones que le parece mejor que la Ligue 1 (francesa) y que considera que está creciendo a gran velocidad y está elevando cada vez más el nivel. "«No pensé que iba a crecer tan rápido, pero sabía que la liga iba a ser muy top, como es ahora. La liga de Estados Unidos es peor que la de Arabia. La gente que habla no sabe lo que dice, solo la gente que juega lo sabe», aseguró al colaborador de El Chiringuito.

Más allá de su presente en Arabia Saudí, el luso también echó la vista atrás y aseguró que él es «el mejor de la historia». En opinión de 'CR7' sus números le avalan y considera que no hay discusión: "La gente está un poco pesada con los 1.000 goles, también sé que es mi culpa. Pero la gente no valora mi momento actual. No me gusta eso, las cosas tienen que pasar con naturalidad. El mejor de la historia soy yo. Los números están ahí»

La recuperación y su futuro en el fútbol

Cristiano, que es consciente de que ya no recupera «como un chaval de 20 años», confesó que este trabajo es igual de importante que el entrenamiento e intenta sacar tiempo de donde no lo hay. «Si me desgasto tres horas, estoy recuperándome otras tres. Si estoy tumbado después de cenar con los niños, me pongo las botas de recuperación mientras veo un partido. Si acuesto a los niños y nos ponemos a ver una película, me conecto a otra máquina. La mujer consigue hacer dos cosas a la vez. Yo también (risas), estoy con las botas o la máquina mientras veo la tele».

Aun así, el luso reconoció que se toma un día libre en cuanto a su alimentación y que es algo que no le cuesta. «Yo hago las cosas bien. Hay un factor psicológico. Una vez por semana, no pasa nada por comer 'comida mala'. La clave está en la rutina. Si me viene mi hijo a darme una galleta, no voy a ser el amargado que le diga que no», explicó en el citado programa.

Además, Cristiano, que cumplirá 40 años en febrero, descartó ser entrenador pero reconoció que quiere seguir vinculado al fútbol. «No pienso en ser entrenador, lo veo casi imposible, no me gusta. Quiero hacer cosas que no domino y me gusta aprender. Ser dueño de un club tiene más sentido, no lo descarto», aseguró, aunque dejó claro que todavía tiene ganas de jugar y hacer goles.

Ya centrado en el Real Madrid, el portugués primero se refirió al no Balón de Oro a Vinicius, una historia que no le pilla por sorpresa. «No hay credibilidad, Vinicius tendría que ser el Balón de Oro. Yo lo he sentido muchas veces y sentí rabia. Con el tiempo lo entendí, son luchas que no puedes ganar», explicó.

Su amor por Madrid

Tras ello, llegó el momento más importante de la entrevista, pues Cristiano habló por primera vez sobre los motivos de su adiós al Real Madrid dejando un recado al presidente, Florentino Pérez. «Quería una motivación diferente. Mi salida no me desgastó. El presidente aceptó mi salida, aunque no se portó muy bien conmigo negociando. Él quería volver atrás, pero yo ya no podía. Aprecio y tengo respeto a Florentino, hablo alguna vez con él. No descarto volver un día cuando termine mi carrera y hacer algo chulo», aseguró.

Por último, Cristiano repasó la enorme rivalidad con el Barcelona, equipo en el que «pudo jugar de pequeño» y habló sobre cómo se vivía cada semana de clásico: «Era una rivalidad histórica. Madrid-Barça, Cristiano-Messi, Ramos-Piqué. Era muy bonito. Tenía muy buena relación con Messi, una vez le traduje en unos premios y todo antes de que empezase la gala. Siempre me trató bien. Ojalá volvamos a ver nuestros números, pero lo veo muy difícil».