España se fue dominando el marcador y el juego al descanso. Hacía los deberes, gracias a un gol de Morata. Nada hacía presagiar que el combinado nacional fuera a sufrir. Sin embargo, la segunda parte cambió la cara de los de Luis Enrique que permitieron que los japoneses se creciera y empataran en el minuto 48 y vieran posible incluso la remontada que llegó tres minutos después con polémica.
EL VAR revisó si el balón centrado desde la izquierda que remató a gol Tanaka había salido completamente o no. La imagen deja muchas dudas y la sombra de lo ocurrido en el Mundial de Corea y Japón sobrevolaba el Estadio Khalifa. España estaba en el alambre.