Luis Enrique organizó un plan respecto a las tandas de penaltis que no funcionó en Qatar
El plan de Luis Enrique que hizo aguas: 3.000 penaltis ensayados, ninguno anotado en el Mundial
El seleccionador puso de deberes a sus jugadores que ensayaran los lanzamientos de penalti en sus clubes. Cada uno tenía que lanzar 1.000 y los tres que lo hicieron ante Marruecos fallaron a la hora de la verdad
Luis Enrique puso deberes a todos los jugadores que iba a llamar al Mundial. En las convocatorias previas al torneo, con meses de antelación, les dijo que ensayaran los penaltis en sus clubes. El seleccionador sabía que un torneo corto que se decide por eliminatorias se pueden decantar por una tanda de penaltis. Y así fue.
España cayó este martes en octavos del Mundial de Qatar ante Marruecos... en penaltis. Y lo hizo con una desastrosa tanda en la que ni un solo jugador español anotó uno de esos penaltis. Solo tiró tres la selección española: al fallar todos no hubo tiempo para más.
Los deberes de Luis Enrique
«Los jugadores tenían que venir con 1.000 penaltis tirados», dijo Luis Enrique en uno de los días de la concentración de España que ya se acabó. El seleccionador era sabedor de que tenía que estar preparado para una circunstancia que es totalmente deportiva, que no es sinónimo de suerte. Él mismo ha dicho en varias ocasiones, también después de la dolorosa derrota ante Marruecos, que una tanda de penaltis «no es una lotería».
Es por ello que a los jugadores les dijo, meses antes, que fueran ensayando los penaltis en sus clubes ya que el calendario está tan apretado que no había tiempo para hacerlo con la propia selección. Cada futbolista tenía los deberes de tirar penaltis en entrenamientos. Luis Enrique, evidentemente, no perseguía a cada uno por sí cumplían con lo dicho. Quedaba a profesionalidad del futbolista hacerlo.
Así, los elegidos en la tanda de penaltis ante Marruecos fueron Sarabia, Soler y Busquets. Fue decisión de Luis Enrique. Si cumplieron sus deberes, Pablo Sarabia llegó a Qatar con 1.000 penaltis ensayados con el PSG, Carlos Soler con la misma cifra y en el mismo equipo y el capitán Busquets en los mismos números en el Barcelona. Los tres tomaron la responsabilidad de tirar los penaltis en el Mundial y los tres fallaron.
El plan de Luis Enrique podía tener sentido si esos penaltis ensayados se realizaran en las mismas condiciones que se tiraron las penas máximas en Qatar. Grada en contra, máxima presión, eliminatoria directa... nada tiene que ver eso con entrenar los penaltis en las ciudades deportivas de los clubes, sin público, con un portero a saber con qué nivel y sin nadie que te recuerde que te estas jugando todo un Mundial.
A España le ha salido todo mal el torneo que inició con un 7-0 a favor. También falló en un plan de lanzamientos de penaltis que a la hora de la verdad hizo aguas. Con muchos penaltis ensayados no solo no valía, sino que se firmó la tanda de penaltis más desastrosa que se recuerda. Cada penalti era un fallo. Y eso que la suma de las penas máximas que ensayaron los tres que lo tiraron eran 3.000. Qué mejor definición a esta triste eliminación de España.
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