Alcaraz apaga la ilusión británica de Norrie con un recital de tenis y se mete en semis de Wimbledon

Carlos Alcaraz está absolutamente imparable en Wimbledon y se ha llegado a un punto en el que parece imposible pensar que haya alguien que sea capaz de frenarle. El murciano va con todo a por su tercer título consecutivo en Londres y ya está a tan solo dos partidos de lograrlo (6-2, 6-3 y 6-3).

Salió el sol en el distrito SW19 de Londres y la Centre Court del All England Club se llenó para presenciar en directo el segundo duelo de cuartos de final de Wimbledon entre Carlos Alcaraz y Cameron Norrie, el último superviviente británico del torneo y, por tanto, el ídolo del público inglés.

El encuentro arrancó con la igualdad esperada y los dos primeros juegos transcurrieron con normalidad. Sin embargo, el español salió con ganas de poner tierra de por medio desde el inicio y en el segundo turno de saque de Norrie logró el primer break de la tarde, situación que no gustó al británico y provocó el primer gesto de disconformidad hacia su banquillo.

Se notaba lo que había en juego y ese primer break le dio alas a Alcaraz. El murciano estaba con un estado de inspiración bárbaro y aprovechó las constantes indecisiones y fallos de Norrie para dejar el primer set aún más encarrilado. Se estaba gustando Carlitos y el saque le estaba funcionando de maravilla. No se le podía pedir nada más al número dos del mundo.

Sólo le faltaba cerrar el primer set. La situación era favorable y, salvo cataclismo, se lo iba a llevar sin sufrimiento. Y así fue. Alcaraz volvió a tener otro gran juego al saque y le puso el sello al primer parcial en 28 minutos. 6-2 para el tenista de El Palmar y aplauso general para él.

Alcaraz no afloja

El partido empezó de maravilla para el murciano. Pero en un Grand Slam ganar un set no quiere decir nada. Todavía necesitaba sumar dos más para meterse en semifinales y, en ese sentido, Norrie iba a tratar de competir. El británico estaba jugando en casa e iba a vender cara su piel mientras fuera posible.

Sin embargo, pronto se empezó a comprobar que Carlitos no iba a bajar el ritmo. Porque al igual que sucedió en el primer set, el murciano le rompió el saque a Norrie y empezó con ventaja el parcial. El número dos del mundo tenía el partido perfectamente controlado y Norrie no estaba dando signos de reacción.

Los juegos fueron pasando y el break de distancia se mantenía. El segundo set dependía exclusivamente de lo que fuera a hacer Alcaraz y en ese aspecto el tenista murciano seguía mostrando una actitud impecable que le sirvió para cerrar el segundo parcial por 6-3. El murciano estaba a tan solo un set de alcanzar su tercera semifinal consecutiva en el Grand Slam británico.

Recital de tenis en la central

La de este martes era la tarde de Alcaraz. El murciano estaba pasando el rodillo por la Centre Court y no le estaba dando ni una sola opción a Cameron Norrie. Carlitos no quería complicaciones y estaba sacando su mejor versión sobre la hierba londinense.

Alcaraz se sentía como pez en el agua y necesitaba muy poco para buscar el fallo de Norrie. El tercer set estaba siendo otro recital del murciano y, en ese sentido, el británico bajó definitivamente los brazos. El partido era del murciano y no se le iba a escapar.

Y así fue. Alcaraz remató el duelo de cuartos de final a lo grande y se plantó en su tercera semifinal consecutiva sacando su mejor versión sobre la hierba londinense. Juego, set y partido para el murciano. El viernes buscará meterse en la final contra el estadounidense Taylor Fritz.