La ministra de Hacienda, María Jesús Montero
El truco con el que Montero oculta el fuerte alza de la presión fiscal desde que gobierna Sánchez
Hacienda espera recaudar 6.509 millones más en 2024 que el año anterior
La presión fiscal en nuestro país ha aumentado con este Gobierno hasta alcanzar máximos históricos por encima del 38 %. Entre 2018 y 2022, los ingresos por impuestos y cotizaciones sociales han aumentado un 21 % a pesar de que la mejoría del PIB apenas ha sido del 12 % en ese periodo.
Este martes, María Jesús Montero aseguraba que España sigue estando por debajo de la media europea en presión fiscal. No le falta razón a la ministra de Hacienda, que, sin embargo, deliberadamente obvia que este porcentaje –calculado como los ingresos tributarios totales sobre el PIB– lleva subiendo hasta niveles desconocidos en nuestro país.
En 2022, esta tasa ascendía al 38,3 %, suficiente para mantenernos por debajo de la media la UE, pero que nos convierte en el país donde más ha crecido en los últimos años, con casi tres puntos porcentuales más que en 2019.
El problema es que este porcentaje no es capaz de explicar situaciones como la de nuestro país que, teniendo una presión fiscal menor a países de nuestro entorno, realiza un esfuerzo fiscal mucho mayor. Por ello, diversos expertos señalan la necesidad de apoyarse en otros índices.
El Instituto de Estudios Económicos, por ejemplo, ha desarrollado el llamado indicador de presión fiscal normativa que tiene en cuenta cómo grava el sistema fiscal independientemente de la recaudación que obtenga. Así, nuestro país obtenía, en 2022, 116,4 puntos, un 16,4 % más que la media comunitaria y mayor que los 112,8 puntos de 2021 o los 110,5 de 2020.
Además, el crecimiento del PIB nominal es mucho mayor que el crecimiento real por lo que, en momentos de inflación, puede dar la impresión de que la presión fiscal se reduce. Así, si se calcula la presión fiscal en base al PIB real –PIB nominal dividido por el deflactor–, encontramos que los porcentajes son muy superiores a los de la media comunitaria.
De acuerdo con este cálculo, desde la llegada de Sánchez en 2018, la presión fiscal habría aumentado en 2022 en casi siete puntos porcentuales en lugar de los menos de tres por el cálculo del PIB nominal.
Fin de las medidas anticrisis
Para el año 2023 y 2024, Hacienda calcula que la presión fiscal será del 38,1 % y del 38,6 % respectivamente, y eso que se han aplicado las medidas anticrisis, algunas todavía vigentes este año.
Y es que, a pesar de las medidas de alivio fiscal, el Ministerio ingresó en 2023 2.644 millones más que el año anterior, que ascenderán hasta los 6.509 millones en 2024, gracias principalmente a las reformas del IRPF, el impuesto de sociedades, el IVA, los impuestazos a banca y eléctricas, y la reforma de pensiones.
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