Los clientes deben ser precavidos a la hora de pagar con tarjeta
Seguridad
Importante aviso de la Guardia Civil: si al pagar con tarjeta te hacen esta petición no hagas caso
«Cuando pagues con tarjeta, no la pierdas de vista. Solo son necesarios unos segundos para clonarla y después cometer una estafa», avisan en sus redes sociales
En la actualidad, cada vez son menos las personas que llevan efectivo para pagar. De hecho, a pesar de que hay ciudadanos que se oponen a renunciar al dinero en metálico, es habitual que se utilice la tarjeta en cualquier establecimiento hostelero, comercio o supermercado, debido a la comodidad que ofrece.
Sin embargo, este sistema de pago tiene algunos riesgos en cuanto a seguridad se refiere, lo que requiere la implementación de mínimas medidas de control que, a menudo, los usuarios suelen olvidar. Debido a esto, la Guardia Civil ha avisado a través de sus redes sociales de que los clientes deben ser precavidos cuando paguen con su tarjeta.
Principalmente, a la hora de utilizar la tarjeta en cualquier compra, el usuario no debe confiarse demasiado. Además, tal y como avisa la Guardia Civil en X, antes Twitter, «cuando pagues con tarjeta, no la pierdas de vista. Solo son necesarios unos segundos para clonarla y después cometer una estafa», avisan en sus redes sociales.
Recomendaciones del Banco de España
En este sentido, el Banco de España también ha hecho otras recomendaciones básicas para un pago con tarjeta seguro, como, por ejemplo, pedir copia de la operación. El organismo ha explicado que este resguardo del terminal de punto de venta (TPV) con los detalles del pago, es necesario para saber cuál es la cantidad que te han cobrado.
Asimismo, aunque no es una estafa nueva, los ciberdelincuentes siguen utilizando el carding para robar los datos de tu tarjeta, que consiste en falsificar y copiar tarjetas bancarias, o robar datos personales e información financiera.
Finalmente, también es muy importante revisar y estar atento a los SMS y correos electrónicos que recibas, verificando siempre el remitente que los manda, las diferentes faltas de ortografía, los posibles enlaces fraudulentos y las expresiones poco habituales.
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