El presidente de Eurecat, Daniel Altimiras, junto al vicepresidente del patronato, el ex presidente del Parlamento, Roger Torrent
El centro tecnológico que impulsa la Generalitat recibe 140 millones en subvenciones en los cuatro últimos años
El vicepresidente del patronato es Roger Torrent, y en el área ejecutiva hay otros dos miembros de Esquerra Republicana de Cataluña
La Fundación Eurecat, el centro tecnológico que nació en 2015 para integrar los seis centros tecnológicos de Cataluña, ha recibido entre los años 2020 y 2024 algo más de 143 millones de euros en subvenciones, según las bases de datos oficiales del Ministerio de Hacienda. La mayor cantidad, unos 100 millones, proviene de ACCIÓ, la agencia para la competitividad de la empresa de la Generalitat de Cataluña.
El principal objetivo de ACCIÓ es fomentar la innovación y la internacionalización entre las empresas catalanas, y realmente está poniendo dinero encima de la mesa: en 2020 dieron a Eurecat 20 millones; en 2021, 40; en 2022, 20, y en 2023, otros 20 millones. En total, 100 millones.
El Estado también ha puesto su granito de arena, y le ha aportado casi 30 millones de euros en subvenciones desde el año 2020.
ACCIÓ está adscrita al Departamento de Empresa y Trabajo de la Generalitat, y por este motivo hay varios miembros destacados de Esquerra Republicana, el partido que gobierna en Cataluña, en el patronato y en la comisión ejecutiva de Eurecat. El que fuera presidente del Parlamento catalán entre los años 2018 y 2021, Roger Torrent, es el vicepresidente del patronato. Como uno de los vocales figura Albert Castellanos, militante de Esquerra Republicana y ex director general de Promoción, Competencia y Regulación de la Generalitat en el año 2016, teniendo a Oriol Junqueras como consejero; mano derecha de Pere Aragonés entre los años 2018 y 2021 en la Vicepresidencia de Economía y Hacienda y consejero delegado de ACCIÓ desde 2022, además de secretario de Empresa y Competitividad en la Generalitat.
Por lo que se refiere a la comisión ejecutiva, están Joan Romero Circuns, director ejecutivo de ACCIÓ, y Lluis Juncá, que es ingeniero y director general de Innovación de la Generalitat en la actualidad. Antes fue mano derecha de Oriol Junqueras como director de la oficina del vicepresidente en 2016-2017 y en 2018 director general de Promoción Económica, Competencia y Regulación, y de Economía y Hacienda, controlando entre otras funciones la gestión de fondos estructurales provenientes de Europa.
Los representantes de Esquerra están bien situados en esta organización, gran acogedora de subvenciones, aunque su impulso no le está sirviendo aún para situarse cerca de grandes redes de centros tecnológicos como Fedit. Mientras que Eurecat surge de la fusión de seis centros tecnológicos, factura 62 millones, tiene más de 2.000 empresas cliente y más de 750 profesionales, Fedit reúne a 52 centros tecnológicos, factura más de 750 millones y tiene más de 26.000 empresas cliente y de 9.500 profesionales.
Aun así, Eurecat empieza a situarse en ciertos ambientes entre los principales centros tecnológicos de Europa. Además de su empeño por potenciar en su región la innovación tecnológica como palanca para la competitividad empresarial, con proyectos mano a mano con las empresas, extiende también su trabajo fuera de Cataluña. La última ciudad en donde ha abierto una sede ha sido en Málaga, hace tan solo unos días.
Eurecat trabaja para la mayoría de sectores empresariales del país, entre ellos la alimentación, la energía y los recursos, la automoción, la aeronáutica, el ferroviario, los sistemas y procesos industriales, el sector público, las industrias creativas y culturales, la industria textil, la salud, la construcción, el comercio, las finanzas y seguros, las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC), la biotecnología, la formación, el deporte, el turismo, la consultoría y la química. Entre sus especialidades tecnológicas están la Industria 4.0, drones y robótica móvil, microtecnología y salud conectada.
Los 33,4 millones de euros de subvenciones que Eurecat recibió en 2022, por poner un ejemplo y situarlo en su contexto, están por encima de los 19 millones que obtuvo en ese año la Fundación del Hospital Universitario Vall D'Hebron o de los 17,2 millones de la Fundación Acción Contra el Hambre. Las cifras resultan normales en Eurecat, pues las subvenciones que reciben se destinan a proyectos ambiciosos de investigación y desarrollo que buscan anticiparse tres o cinco años a la evolución esperada de su mercado, o a grandes programas públicos internacionales a los que acuden en concurrencia con otras empresas de fuera de España.
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