Ángel de la Fuente, director de Fedea.
Entrevista
Ángel de la Fuente, experto en financiación territorial: «La quita de deuda de Montero está muy poco pensada y es muy peligrosa»
El director ejecutivo de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), uno de los mayores especialistas de España en la materia, piensa que las ayudas deberían destinarse a las comunidades infrafinanciadas, no a Cataluña
La propuesta del Gobierno de Pedro Sánchez de perdonar 83.252 millones de euros a las comunidades autónomas sigue levantando ampollas, especialmente por haber incluido a Cataluña dentro de ese capítulo. El director ejecutivo de Fedea, Ángel de la Fuente, es uno de los mayores expertos de España en financiación territorial, y no está nada de acuerdo con la idea. Nos explica por qué.
–¿Qué le ha parecido el planteamiento de perdón de la deuda?
–Está bastante mal hecho. En general, no soy muy partidario de las quitas por los problemas de incentivos, de riesgo moral, que generan. Si las comunidades creen que las van a rescatar, gastan más de lo que tienen, y seguirán con ello. La formulación de la quita es además especialmente grave porque la venden diciendo que en 2008 hubo un shock (la crisis financiera) y «no os cuidaron lo suficiente». Entonces ahora, retroactivamente, vamos a compensaros por aquello. Da la sensación de que, aunque no me rescates hoy, lo harás en algún momento, con lo cual su posición se hace más fuerte. Es como si dieras a las comunidades autónomas una póliza de seguro a todo riesgo contra las vacas flacas. ¿Quién va a preocuparse de contener el gasto si tiene esa póliza en el bolsillo? La propuesta está muy poco pensada y es muy peligrosa. Y luego está el reparto entre las comunidades autónomas: han dado martillazos hasta conseguir que salga lo que quieren que salga, pero es un poco feo.
–Hay casos en los que estaría más justificada la ayuda a las comunidades que en otros.
–En la propuesta se mezclan cuatro criterios. Hay dos que, bien aplicados, serían razonables, y otros dos que no son para nada razonables. Los dos razonables son que está bien que se compense de alguna manera a las comunidades autónomas que han estado infrafinanciadas en los últimos veinte años, y que reciba más quien más necesidades reales de gasto tenga (el criterio de población ajustada). Pero los otros dos criterios para condonar la deuda no deberían estar ahí. Uno es, básicamente, un premio a los más endeudados. Es darle palmaditas a los torpes, a los menos trabajadores. No debería incentivarse la acumulación de deuda. Y el otro es premiar a los que han subido los impuestos. Es muy poco respetuoso con una autonomía y con el resto, con la política fiscal que quieran hacer en el uso de sus márgenes de actuación. El Gobierno no debería meter ahí la nariz.
–¿En qué casos estaría justificada la ayuda a las comunidades?
-En el de las comunidades autónomas que están infrafinanciadas, por debajo de la media, desde hace muchos años: Murcia, Valencia, Andalucía y Castilla-La Mancha.
–Cataluña está en la media.
–Así es. Está en la media, y por tanto no estaría infrafinanciada. Según ese criterio, no debería tocarle nada. No tendría que estar entre las mejor tratadas en la propuesta de quita, y lo está.
–¿Cómo serían las divisiones entre comunidades a día de hoy?
–Siendo 100 la media de financiación para las comunidades autónomas, las cuatro infrafinanciadas se situarían entre los 91 y los 95 puntos. País Vasco estaría en 220, Navarra en 160-180, La Rioja y Cantabria en 120-125, y las demás escalonadas, con Madrid y Cataluña muy cerca de 100, en la media de financiación.
–¿Era esta medida de condonación la que había que tomar ahora?
–Esto no ayuda. Habría que haber negociado todo a la vez y usar la deuda para engrasar el acuerdo de la reforma de financiación. Si alguien pierde en relación a la situación que había antes, puedes darle un caramelo vía deuda, pero ahora ya han negociado, les han dado lo que les han dado y a cambio ellos no dan nada, y ya empezaremos otra vez con la negociación del sistema.
–Hay expertos que dicen que, a efectos contables, no cambia nada: la deuda que era de las comunidades autónomas pasa a ser del Estado, pero el volumen total de deuda de las administraciones públicas sigue siendo el mismo. ¿Qué opina al respecto?
–Depende. El efecto es neutro para el conjunto, pero no para las administraciones. Las autonomías se liberan de la deuda y pasa el Estado. Las autonomías tendrán menos gasto y más margen, y el Estado tendrá más deuda, más gasto y menos margen. Algo tendrá que hacer.
–Al menos es un alivio para las regiones infrafinanciadas.
–Sí, pero deberían darles más dinero. Les ayuda, pero se les debería ayudar bastante más. Habría que concentrar las ayudas en ellas y no tanto en otras, como Cataluña.