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04 de mayo de 2024

Una persona sostiene una careta donde se lee "No Ley Mordaza" durante una manifestación contra el encarcelamiento de Pablo Hassel

Una persona sostiene una careta durante una manifestación contra el encarcelamiento de Pablo HasselClaudia Alba / Europa Press

Ley de Seguridad Ciudadana

ERC salva a Sánchez de un estrepitoso fracaso en la reforma de la ‘Ley Mordaza’

Los independentistas votan a favor para que la reforma pase a la Comisión de Interior pero destaca que se mantienen las diferencias

En el último momento, después cuatro reuniones conocidas y unas cuantas más con carácter secreto, la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana que no gusta a nadie más que a los socios de Gobierno ha conseguido continuar su tramitación parlamentaria gracias al voto favorable de Esquerra Republicana. Eso, los catalanes mantienen que se mantienen las discrepancias en los cuatro artículos relativos a la eliminación de las pelotas de goma, la desobediencia, las faltas de respeto a la autoridad y las ‘devoluciones en caliente’.
De esta manera, gracias a los votos de ERC, PSOE y Podemos mantienen una reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana pactada entre ellos, que provocó la mayor movilización de policías de la historia en España, y se convirtió en uno de los bastiones del acuerdo programático alcanzado entre ambas formaciones en 2019 para alcanzar el Gobierno. Tras el paso dado este miércoles, ahora esta reforma pasará a la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados, donde continuarán las negociaciones entre socialistas e independentistas.
El PSOE y Unidas Podemos han destacado que el consenso alcanzado permite ya hablar de una «nueva ley de seguridad ciudadana» que garantiza el «equilibrio» entre libertades como el derecho de manifestación y la seguridad jurídica en la labor de los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
ERC, por su parte, ha reconocido que ha «permitido» con su voto favorable cerrar la fase de reuniones a puerta cerrada de la ponencia, aunque subrayando que esto «no quiere decir que se haya llegado a un acuerdo».
Dado que su voto no era imprescindible para continuar la tramitación parlamentaria, Bildu se ha mantenido en el ‘no’ porque considera que “se mantiene aún el corazón de la Ley Mordaza aprobada por el PP en 2015.
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