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20 de mayo de 2024

Pedro Sánchez y Ursula von der Leyen, en la última visita de la presidenta de la Comisión Europea a Madrid

Pedro Sánchez y Ursula von der Leyen, en la última visita de la presidenta de la Comisión Europea a MadridAFP

Sánchez vería con buenos ojos un segundo mandato de Von der Leyen

La relación entre ambos es buena a pesar de la convocatoria adelantada de elecciones en España

Ursula von der Leyen, a pesar de ser presidenta de la Comisión Europea gracias a los votos del Partido Popular Europeo, no se ha caracterizado por llevar a cabo unas políticas excesivamente de derechas al frente de Europa. Quizás por eso Pedro Sánchez no vea con malos ojos un segundo mandato de la alemana si los conservadores vuelven a ganar las elecciones en 2024.
Durante el marco de la presentación de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea, Sánchez mostró su buena conexión con Von der Leyen. Compartieron confidencias, mantuvieron una agradable reunión y dejaron de lado la convocatoria adelantada de elecciones para el 23-J.
No sentó bien la decisión del presidente del Gobierno de adelantar los comicios, pero incluso esa pequeña tensión fue enterrada bajo la gran relación que tiene Sánchez con la presidenta de la Comisión. Él elogió su trabajo y su visión en un primer mandato al frente de Europa marcado por la pandemia y por la crisis provocada por la guerra en Ucrania. Tampoco obvió, como no podía ser de otra forma conociendo al mandatario español, la importancia de que haya mujeres en puestos de relevancia internacional.
Von der Leyen no ha confirmado aún que quiera seguir al frente de la Comisión Europea y probablemente tampoco lo haga hasta que tenga todos los votos atados para serlo. No será un camino sencillo, ya que la que fuera ministra de Defensa de Alemania y el líder del Partido Popular Europeo, Manfred Weber, han discrepado abiertamente en algunos temas, sobre todo en lo relativo al cambio climático.
Para la presidenta europea, la postura de la izquierda sobre el cambio climático es la adecuada, lo considera «un hecho» y cree que es «compatible» la prosperidad con el cuidado del medio ambiente. Mantiene abiertamente este discurso y ha enviado algún mensaje directo al PPE, que votó en contra de la Ley de Naturaleza y tendrá que decidir de nuevo su postura sobre el tema en la votación de la semana que viene en Estrasburgo.
La visión ecologista no es la única que comparten Sánchez y Von der Leyen, que también convergen en la idea de una Europa federalizada. Nexos comunes que llevan al presidente del Gobierno a aplaudir un nuevo posible mandato de cinco años de la política alemana. Si no hay una presidencia socialista, mejor que sea para Von der Leyen.
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