La portavoz, entre las ministras de Sanidad (izquierda) e infancia
Final de infarto
Puigdemont exprime la amnistía y arrastra a Sánchez a otro Pleno humillante
La amenaza de Junts de votar en contra de la ley para así devolverla a la Comisión de Justicia y obligar al PSOE a rehacerla tiene en vilo a los socialistas. Nadie sabe cómo acabará la tarde
Los socialistas contienen la respiración ante la posibilidad de que Junts eche atrás la proposición de ley orgánica de amnistía en el Pleno de este martes por la tarde en el Congreso para devolverla a la Comisión de Justicia y allí seguir presionando al PSOE con introducir más cambios. Una jugada que el partido empezó a rumiar tras conocer el movimiento del juez instructor de la trama rusa del procés y que El Debate adelantó este martes a primera hora.
Las constantes evasivas de la portavoz del Gobierno en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros son el mejor síntoma de ese estado de inquietud. Aunque los socialistas se agarran a esta tesis: si Junts vota en contra tendrá que justificar ante la opinión pública catalana por qué, y no es fácil. «El PSOE no responde por Junts. Si Junts vota en contra, que lo explique», según fuentes del Ejecutivo.
Así las cosas, en plena cuenta atrás Pilar Alegría despachó todas las preguntas al respecto con la misma coletilla: «Máximo respeto al legislativo. Les corresponde a los grupos parlamentarios manifestar su posición». Porque, según la portavoz del Ejecutivo, el Congreso es el que tiene ahora la pelota en su tejado. Como si la negociación de esta ley de amnistía no la estuviese liderando el ministro de la Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, que hasta se encargó de presentarla en noviembre.
Pedro Sánchez, Félix Bolaños, Carles Puigdemont y Miriam Nogueras escenifican una negociación opaca
Alegría fue preguntada por la posibilidad de que Junts vote en contra y fuerce más cambios. No respondió. También, por si el PSOE está negociando la inclusión a última hora de alguna de las enmiendas que Junts lleva a la votación de este martes, a pesar de que la semana pasada fueron rechazadas en la Comisión de Justicia. Tampoco respondió. Y lo mismo cuando le preguntaron si el Gobierno considera que el texto no necesita más cambios y lo da por cerrado. Incluso le preguntaron si el Ejecutivo se abre a incluir el delito de traición entre los amnistiables, pero tampoco entró en eso.
Eso sí, quiso desmarcarse de las denuncias de Junts contra la injerencia de los jueces en esta amnistía. «Máximo respeto al poder legislativo y al poder judicial. Este Gobierno entiende muy bien la división de poderes y el Estado de Derecho en el que estamos», sostuvo Alegría. Ni 24 horas antes, desde la sede del PSOE acusaron al juez instructor del caso Voloh de entrometerse en la voluntad del legislativo.
Para terminar, insistió el «firme compromiso» del Ejecutivo con esta ley, que según Alegría «mejora la convivencia en Cataluña y entre Cataluña y el resto de España».
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