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El expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en un acto recienteEP

Investigación

Zapatero presentó a Maduro como «mi sobrino» a un joven español que dio un pelotazo creando la Bolsa Descentralizada de Venezuela

El expresidente intermedió para la creación de una plataforma de recaudación de dólares que se esfumó meses después de ponerse en funcionamiento

José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente del Gobierno, actuó como nexo directo entre Nicolás Maduro, presidente venezolano, y un joven español al que presentó ante las autoridades como «mi sobrino» para poner en marcha la Bolsa Descentralizada de Venezuela. Tal y como ha podido saber El Debate, Zapatero intermedió personalmente para que Manuel Aarón Fajardo García fuera el encargado de desarrollar el proyecto. El negocio consistía en la creación de un entramado financiero para la recaudación de dólares y, de esta manera, atraer inversión extranjera. Un negocio millonario que, meses después de ponerse en marcha, echó el cierre sin que se aclarara el destino de los fondos ni quiénes fueron los grandes beneficiarios de la operación.

El origen de este intento de ingeniería financiera se remonta a 2018. Venezuela, sumida en una grave crisis económica y aislada del sistema financiero internacional, buscaba nuevas fórmulas para captar capital extranjero. La idea de montar una recaudadora de divisas ajena al control del sistema oficial era vista como una solución de emergencia. El proyecto se presentó bajo una nueva entidad denominada Bolsa Descentralizada de Venezuela, que operaría como un sistema cambiario paralelo, supuestamente transparente, dirigido a inversores privados. Fue entonces cuando Zapatero, que por aquel entonces ya actuaba como figura recurrente en los círculos de poder chavistas, recomendó personalmente a un joven español para liderar el proyecto: Manuel Fajardo, de apenas treinta años, hijo de Francisco Manuel Fajardo Palarea, senador del PSOE.

Según un testigo, lo que sorprendió desde el principio fue el nivel de implicación del expresidente en una operación con fuertes implicaciones económicas, políticas y legales. «No es habitual ver a un expresidente apadrinando a un joven sin trayectoria ante un régimen como el de Maduro ni involucrándose en una estructura financiera de esta naturaleza», explica una de las personas que participó en la constitución del proyecto. «Zapatero no solo recomendó a Fajardo. Lo presentó como ‘mi sobrino’ y se movió para que el Gobierno venezolano le diera carta blanca». La operación, según esta misma fuente, generó sorpresa incluso en el entorno chavista, que no terminaba de entender por qué aquel joven gozaba de semejante respaldo.

El negocio, en sí, era muy sencillo en apariencia. Por cada operación de captación de divisas, Fajardo se llevaría una comisión. El joven viajó a Venezuela, constituyó una sociedad llamada Interban Exchange CA y dio forma al proyecto. Uno de los documentos clave que obran en poder de este periódico revela que Interban iba a estar controlada por dos sociedades. La primera de ellas, Ampajesu SL, domiciliada en Granada y con Fajardo como administrador único, fue constituida el 24 de octubre de 2018, días después de que se cerrara el acuerdo. La segunda, Bull Equity Management LTD, está registrada en Barbados, considerado durante años un paraíso fiscal, a nombre de Dionisio Rafael Sifontes Santos, empresario venezolano relacionado con estructuras de intermediación financiera. Esta sociedad fue registrada por Mossack Fonseca, el despacho panameño mundialmente conocido el escándalo de los Papeles de Panamá.

El entramado que Manuel Fajardo usó para sus negocios en VenezuelaEdición: Ángel Ruiz

El entramado, según las fuentes consultadas, permitía gestionar el flujo de capital sin pasar por los mecanismos habituales de supervisión bancaria. «Era una recaudadora paralela, con apariencia de mercado libre y digital pero sin el escrutinio de los reguladores internacionales. Y quienes estaban al frente, tanto en Venezuela como desde fuera, podían mover los fondos con una trazabilidad limitada». Cuando el sistema ya estaba en funcionamiento, Maduro ordenó que un avión propiedad de PDVSA, la petrolera estatal, recogiera a Zapatero en Santo Domingo (República Dominicana) para trasladarlo directamente a Caracas. La aeronave, un Falcon, hizo el trayecto durante la noche del 18 de enero de 2019.

La relación entre Zapatero y Fajardo se remonta a la amistad que el expresidente mantiene con su padre, el senador socialista Fajardo Palarea. Ambos se conocieron hace casi dos décadas en Lanzarote. El senador era entonces secretario general del PSOE en la isla y acompañaba habitualmente a Zapatero durante sus estancias veraniegas. Con los años, el vínculo se estrechó. Zapatero terminó comprando una vivienda en la isla, valorada hoy en 1,2 millones de euros, por la que solo solicitó una hipoteca de 295.000 euros. Fue en ese entorno privado donde conoció al hijo, Manuel, a quien le gusta que le llamen Midas en referencia al personaje de la mitología griega conocido por convertir en oro todo lo que tocaba.

Fajardo se describe en varias entrevistas como un operador financiero centrado en el análisis matemático de los mercados. Experto en arbitrajes de divisas, inteligencia artificial aplicada a la inversión y estructuras opacas de capital, creó su propio fondo con sede en Luxemburgo, país con una fiscalidad muy favorable para este tipo de vehículos. Su trayectoria ha estado marcada por una rápida ascensión en entornos de riesgo financiero y, de hecho, el punto más relevante de su curriculum vitae fue la puesta en marcha del mecanismo de captación de divisas en un país sancionado como Venezuela puesto en marcha con sociedades instrumentales impulsado con la ayuda de Zapatero.

El negocio se cerró de manera fulminante. Cinco meses después de su inauguración oficial, Fajardo anunció de forma sorpresiva el cierre de la bolsa. El comunicado oficial, firmado por él mismo el 6 de mayo de 2019 y al que ha tenido acceso El Debate, agradece el apoyo recibido «desde el nacimiento de Interban en enero de este mismo año» y afirma que el objetivo por el cual fue creado «ha sido cumplido» añadiendo que «su existencia no es necesaria». No dio resultados ni datos sobre las operaciones realizadas. Tampoco detalló qué papel jugó exactamente Fajardo ni cuánto cobró por su trabajo, ni cómo se gestionaron los fondos recaudados ni quiénes se beneficiaron finalmente del sistema. El Debate se ha puesto en contacto con José Luis Rodríguez Zapatero para preguntarle si recibió algún tipo de contraprestación económica por su mediación en este negocio pero el expresidente ha declinado hacer comentarios.

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