Koldo pactó reunirse con Delcy tres meses después de que Ábalos dejase el Gobierno

La investigación judicial de la Audiencia Nacional sobre la derivada del caso PSOE que salpica a algunos de los miembro del Gobierno, no aforados, ha sacado a la luz nuevas comunicaciones que apuntan a la persistencia de un estrecho vínculo entre el entorno de José Luis Ábalos y el Ejecutivo de Venezuela.

No en vano, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha entregado al magistrado Santiago Pedraz, instructor de la trama de los hidrocarburos, una serie de «evidencias» contenidas en uno de los dispositivos de memoria interceptados a Koldo García Izaguirre, ex asesor del ex ministro de Transportes, con mensajes de WhatsApp que demuestran que Koldo escribió a la vicepresidenta de Venezuela y número dos de Nicolás Maduro, el 7 de octubre de 2021, con la intención de reunirse con ella en Caracas.

Un contacto que se produjo apenas tres meses después de que Pedro Sánchez destituyera a Ábalos de sus responsabilidades en el Ejecutivo socialista y como secretario de Organización del PSOE.

Es decir, como se desprende de la conversación aportada por los agentes de la UCO, pese a la caída política del entonces ministro de Transportes, su mano derecha mantuvo una vía de interlocución directa con Rodríguez, con la que ya había coincidido en el polémico episodio del aeropuerto de Barajas, el denominado 'Delcygate', en enero de 2020, cuando la dirigente chavista aterrizó en España, previa invitación por escrito del propio Ábalos, pese a tener prohibida la entrada en territorio europeo.

En el cruce de mensajes, fechado entre los días 3 y 5 de octubre de 2021, García se presentó a Rodríguez y le planteó, de mutuo acuerdo, una cita en la capital venezolana: «Estaré el jueves ahí para cuando usted me pueda recibir». Una propuesta que la vicepresidenta de Maduro confirma con un escueto «Bien, K», llegando incluso a enviarle fotografías de un acto oficial en el que participaba en ese momento y en el que se puede ver que tanto ella, como otros de los asistentes, llevaban puestas mascarillas.

Dos días después, Koldo insistió en retomar el contacto a través de otros canales de comunicación, aunque en esa ocasión no obtuvo respuesta.

Vínculos con la trama de hidrocarburos

Estos hallazgos forman parte de la investigación que dirige el juez Ismael Moreno sobre la trama de hidrocarburos, una presunta red criminal que diseñó un sistema para defraudar el pago del IVA en las operaciones de combustible y en la que, también, figura como imputado el empresario Víctor de Aldama, considerado uno de los principales comisionistas y supuesto catalizador de los diversos negocios ilícitos de los que pudieron lucrarse tanto Koldo, como su jefe directo Ábalos y, está por determinar, el propio partido.

Así las cosas, el propio magistrado Santiago Pedraz, instructor de la pieza principal del asunto, había solicitado a Moreno que compartiera cualquier información que pudiera ayudar a esclarecer las conexiones entre ambas tramas y así ha sucedido entre los Juzgados de Instrucción número 2 y 5 de la Audiencia Nacional, a través de una providencia a la que ha tenido acceso El Debate.

La documentación remitida revela no solo la relación de Koldo con Rodríguez, sino también con empresarios como Claudio Rivas y la familia Pano, implicados en operaciones sospechosas ligadas al sector energético. De hecho Koldo ha llegado a interceder ante el gabinete del Ministerio de Industria para facilitar reuniones entre cargos públicos y representantes de esta red, en paralelo al pago de comisiones de las que se habría beneficiado la trama y, presuntamente, por extensión el PSOE de Ferraz sobre el que en el Supremo planea la sombra de una posible financiación ilegal.

Antecedentes de un vínculo polémico

La sombra de Venezuela ha acompañado a Ábalos desde que, en la madrugada del 20 de enero de 2020, recibiera en Barajas a Delcy Rodríguez. Aquel episodio nunca fue aclarado del todo por el Gobierno, y el archivo judicial del caso apenas redujo las especulaciones. Ahora, las nuevas evidencias presentadas por la UCO reactivan el debate jurídico y político sobre el verdadero alcance de la relación entre el Ejecutivo de Sánchez y el régimen de Maduro y las consecuencias de la misma.

En los documentos judiciales también constan mensajes en los que Ábalos habría informado al presidente del Gobierno con cuatro días de antelación de la llegada de Rodríguez a España en 2020, obteniendo una escueta respuesta de Sánchez: «Bien». Tal y como el propio presidente reconoció con posterioridad y en un momento en el que aseguró desconocer las prohibiciones vigentes para Delcy en todo el espacio Schengen, del que forma parte el territorio español.