Ábalos ironizó con Koldo sobre la posibilidad de «desgravarse» las «donaciones» de efectivo a sus amantes

si hay un denominador común en una buena parte de las conversaciones entre el ex ministro José Luis Ábalos y su ex asesor Koldo García Izaguirre es el de la compañía femenina. Ex mujeres, amigas y amantes del que fuera número 3 de los socialistas recibieron dinero en efectivo de la presunta trama que pagó sobresueldos al núcleo duro del PSOE en Ferraz.

Así consta en las evidencias que los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la guardia civil han puesto sobre la mesa del juez instructor Leopoldo Puente, en diferentes soportes y archivos figura una en la que Ábalos y Koldo hablan sobre las cantidades correspondientes a la mujeres que, siempre, rodeaban por una u otra razón al que fuera número 3 de los socialistas. Era tal el volumen de operaciones de pago y regalos que se producían hasta las mismas que, en una ocasión ironizó con su compañero: «Si aún desgravaran estos donativos».

A lo que Koldo respondió: «Jjjjj. Va a ser que no».

Cabe recordar que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil analiza, implacable, las conversaciones contenidas en los móviles incautados al ex asesor ministerial Koldo García Izaguirre, durante los registros a los principales imputados por la corrupción que salpica al Gobierno y que arrancaba, con la 'Operación Delorme', en marzo de 2024, algunos de los cuales han sido determinantes para confeccionar el último informe sobre Ábalos y su situación económico-patrimonial.

La reciente entrega de los agentes que investigan todas las terminales socialistas de pagos irregulares revelaba una nueva derivada relativa a la «vida íntima» de José Luis Ábalos de tal magnitud que, de acuerdo con las pesquisas, pudo haberse convertido en destinataria de una serie de pagos irregulares, fuera del radar de sus remuneraciones oficiales, que habrían incrementado su patrimonio, sin justificar.

El que fuera ex ministro de Transportes recibió, presuntamente, un trato de favor en el seno del PSOE permitiéndole colar facturas y tickets que no correspondían con gastos de representación, y que nadie se atrevió a fiscalizar al tratarse del secretario de Organización, es decir, el responsable directo de la Gerencia que se convirtió en una «fuente irregular de ingresos en metálico (...) sin respaldo documental» para el socialista. Que, en ocasiones respondía a la intervención de su hombre de proximidad, Koldo, proporcionándole servicios de compañía, regalos para sus acompañantes o compras para su familia más cercana.