Javier Ortega Smith y Teodoro García Egea sellan el pacto PP-Vox en Andalucía en 2019

Teodoro García Egea y Javier Ortega Smith se estrechan la mano tras la firma del pacto para la investidura de MorenoEFE

Después de cuatro décadas de socialismo

Juanma Moreno, el último superviviente del pacto con Vox que hizo posible el 'cambio' en Andalucía

La foto con Vox no afectó a Moreno, quien ganó las andaluzas de 2022 por mayoría absoluta y dejó de depender de los de Abascal

Este martes se cumplen cinco años del pacto que hizo posible el cambio político en la Junta de Andalucía. Los resultados de las elecciones autonómicas del 2 de diciembre de 2018 dejaron abierta la posibilidad de un gobierno alternativo al PSOE después de casi cuatro décadas de socialismo en Andalucía. El PP, con uno de sus peores resultados en unas andaluzas, tuvo que hacer encaje de bolillos para convertir a Juanma Moreno en presidente de la Junta.
Moreno se convirtió en el primer presidente no socialista de la Junta de Andalucía gracias a un acuerdo a tres bandas entre el PP, Ciudadanos y Vox. Los 'populares' llegaron primero a un acuerdo de gobierno con los naranjas y después a un acuerdo de investidura con los de Santiago Abascal. El PSOE calificó este segundo como el «pacto de la vergüenza» y posteriormente fletó autobuses para torpedear la investidura de Moreno.
La imagen de aquel 9 de enero de 2019 fue el apretón de manos entre Teodoro García Egea y Javier Ortega Smith, entonces secretarios generales del PP y Vox, respectivamente, en presencia de Juanma Moreno y del que fuera candidato del partido de Abascal en las elecciones, Francisco Serrano. Hoy ya ninguno ocupa el cargo que ese día ostentaba, excepto Moreno, que pasó de cadáver político a barón con más poder del PP.
La dirección de Vox sustituyó en octubre de 2022 a Ortega Smith por Ignacio Garriga al frente de la Secretaria General del partido y lo nombró vicepresidente, mismo cargo que desempeñan Jorge Buxadé y Reyes Romero y que le restaba competencias sobre la gestión interna de la organización «para dedicarse por completo a tratar de conseguir la Alcaldía de la capital». Actualmente es concejal del Ayuntamiento de Madrid y diputado nacional.
El pacto de Andalucía fue el primer acuerdo que el PP tuvo que firmar con Vox, del que dependió Moreno durante su primer mandato para sacar leyes adelante. Sin embargo, las concesiones fueron escasas si se compara con otros posteriores. Además, los 'populares' incumplieron gran parte de su contenido, un hecho que motivó la exigencia de los de Abascal de entrar en los Gobiernos autonómicos que preside el PP en minoría.
El Gobierno del 'cambio' se asentó a lo largo del primer mandato de Moreno, a quien no afectó la foto con Vox. De hecho, en 2022 ganaría las elecciones por mayoría absoluta, un inesperado resultado por el que el dirigente 'popular' se deshizo de la dependencia de Abascal, que se presentan ahora como la «verdadera oposición» al Gobierno de Moreno, ya sin Ciudadanos, a cuyos líderes en Andalucía integró en distintos niveles de la Junta.

«La confrontación es su hábitat natural»

El PSOE andaluz hizo ayer lunes balance de estos últimos cinco años después del pacto que permitió el 'cambio' en Andalucía. Los socialistas consideran que «en estos cinco años a Moreno Bonilla se le ha caído la careta», toda vez que «del Juanma de las buenas formas no queda nada». «La confrontación es su hábitat natural», aseguran.

El portavoz de Presidencia del Grupo Socialista, Josele Aguilar, señaló que Andalucía afronta 2024 con Juanma Moreno al frente de un Gobierno que «no sólo es indolente e incompetente, sino que podemos afirmar que es un Gobierno en crisis». También denunció el «alejamiento» de Moreno Bonilla respecto a la realidad de Andalucía: «Lleva año y medio levitando sobre la mayoría absoluta y esto le impide entender los problemas reales de Andalucía».
Juanma Moreno es el último superviviente político del pacto de investidura que propició el 'cambio' en Andalucía; la única firma que ha permanecido inalterable cinco años después. Además, tiene las «manos desatadas» ―necesidad que expuso a los andaluces para las elecciones donde logró la mayoría absoluta―, como Isabel Díaz Ayuso en Madrid, siendo ambos los únicos presidentes autonómicos del PP que han logrado zafarse de Vox.
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