La nueva planta ha sido desarrollada por la empresa AGR Biogás y ha contado con una inversión de 25 millones de euros
Granada
La primera planta andaluza que convierte los residuos de las granjas en energía para más de 11.000 hogares
Tendrá capacidad para generar cada año 58 GWh de biometano, a partir de restos de la actividad agroganadera de la zona
La crisis geopolítica ha evidenciado la necesidad urgente de independizar a España de las importaciones del gas ruso y de apostar por el biometano, la solución más eficiente y sostenible para avanzar hacia la descarbonización sin comprometer la competitividad.
Esta semana se ha inaugurado, en el municipio granadino de La Calahorra, la primera planta agroindustrial de biometano de Andalucía, con inyección directa a la red gasística general, por lo que será la primera vez que se suministre en la comunidad este gas de origen renovable listo para el consumo por parte de la industria y los hogares.
La nueva planta, desarrollada por la empresa AGR Biogás, ha contado con una inversión privada de 25 millones de euros y generará anualmente 58 GWh de biometano, lo que equivale al consumo energético anual de más de 11.000 hogares. Esta cifra supondrá una reducción de 23.000 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera, el equivalente a la plantación de 920.000 árboles, y todo ello con tecnología de última generación para alcanzar la máxima eficiencia en generación de gas verde y reducción de olores.
Más de medio centenar de empleos
La puesta en marcha de estas instalaciones ha supuesto la generación de más medio centenar de empleos directos e indirectos en la comarca ubicada al norte de la provincia, de los que una veintena participaron en las obras de construcción y el resto de puestos de trabajo se mantendrá con la actividad de la planta.
Numerosos agricultores y ganaderos de la comarca han asegurado que encuentran en este proyecto un importante aliado en su gestión de restos orgánicos y reducción de emisiones, además de impulsar a la economía local.
Por su parte, el alcalde de La Calahorra, Alejandro Ramírez, ha señalado que con esta pionera planta de biometano el municipio se convierte en «ejemplo y referente en energías renovables en Andalucía, marcando el camino energético del futuro con un proyecto impulsor de desarrollo, empleo y riqueza para la comarca y que ayuda a sus agricultores y ganaderos».
Un proyecto de economía circular
La planta está situada a siete kilómetros del núcleo poblacional de La Calahorra y procesará cada año 104.000 toneladas de restos agroganaderos como gallinaza, purín porcino, alperujo, lactosuero y otros restos líquidos procedentes de la agroindustria, todos ellos de carácter orgánico.
De estos desechos, que si no se tratasen resultarían contaminantes para la atmósfera, se extrae energía limpia que se inyecta directamente a la red gasística general, gracias a la conexión ejecutada por Redexis mediante la construcción de un ramal de 13 kilómetros, que permitirá llevar esta energía limpia a los consumidores domésticos e industriales de la zona.
Por otro lado, la planta generará también biofertilizante y digestato, con compuestos estabilizados que se devuelven al campo para mejorar la calidad de los suelos. Se trata, por tanto, de un proyecto de economía circular que redunda en la sostenibilidad de las zonas rurales. Además de los beneficios que reporta esta planta de biogás a las familias de los granjeros, este proyecto contribuye a la fijación de la población rural en su territorio, dando impulso a la economía local del Marquesado del Zenete.