Reparación de un crucero en los astilleros de Navantia en Cádiz
Cádiz
Royal Caribbean levanta el veto a Cádiz por la huelga del metal y trae a reparar un crucero a Navantia
El Explorer of the Seas entra en el astillero casi tres meses después del conflicto que alarmó a las navieras
La huelga del metal de Cádiz llevó a la ciudad a un punto de tensión que afectó a distintos sectores, desde la hostelería y el turismo a la propia industria naval y aeronáutica. Fueron trece días de paro completo, del 18 de junio al 7 de julio, con disturbios en la calle, y tres semanas de conflictividad. En total, hubo 25 detenidos, el último este mismo mes de septiembre.
Los astilleros de la Bahía de Cádiz fueron el epicentro de la lucha y los paros y la situación en las calles puso en un brete a la propia sociedad pública Navantia respecto a sus clientes. El caso del crucero Liberty de la naviera Carnival despertó todas las alarmas: el buque quedó parado y «secuestrado» por los trabajadores en el dique de Navantia Río San Pedro, pese a que debía salir del muelle. Finalmente pudo salir hacia Marsella para culminar la reparación, pero Carnival solicitó una indemnización de 4,5 millones de dólares amenazó con cancelar futuras reparaciones.
Royal Caribbean, que ha confiado hasta 45 reparaciones de sus barcos desde 2014 a Navantia, tomó nota y se curó en salud: canceló la llegada del crucero Star of the Seas al astillero gaditano debido a la huelga del metal. Aunque su entrada estaba prevista para el 18 de julio, cuando ya había acuerdo entre las partes, la empresa sostuvo su veto a Cádiz. Así ha sido ahora ahora.
Un astillero «único»
Tres meses después, Royal Caribbean firma la paz con Cádiz y trae a los astilleros su Explorer of the Seas, un crucero de 311 metros y capacidad para más de 3.000 personas que estará en reparación hasta mediados de octubre. El buque de la compañía ya reposa en el dique 4, donde se acometerán trabajos rutinarios para mantener este crucero que cumple 25 años.
La compañía con sede en Miami siempre ha valorado la fiabilidad del astillero gaditano: «Cádiz ofrece unas condiciones únicas: profesionales altamente cualificados, experiencia en grandes buques y un clima propicio para trabajar», expresó tiempo atrás Laura Andersen, directora de operaciones técnicas.
De hecho, poco antes del conflicto, el 8 de abril, Navantia y Royal Caribbean firmaron un acuerdo de continuidad para la renovación de los cruceros, «fortaleciendo la larga relación entre ambas compañías y estableciendo las bases para futuros proyectos de modernización y revitalización», según señaló Navantia.
Ambas parte se mostraron «absolutamente encantada» con una relación que ya supera la década y que pudo saltar completamente por los aires en los días críticos de inicio del verano. Por suerte, las aguas han vuelto a su cauce.