Un transistor antiguo
El transistor, el aparato analógico que venció a la tecnología en Toledo y en toda España durante el apagón
En la ciudad imperial, algunos de los pocos comercios abiertos, con sus propietarios de gesto perplejo, emitían desde su oscuro interior un sonido añejo
España volvió durante la tarde de ayer a un tiempo pasado. La privación de la electricidad dejó incomunicado e inerme a todo el país, dependiente de un solo tipo de energía.
Bienaventurados aquellos que guardaban en sus cajones una radio analógica con pilas, una verdadera salvación en la tarde y noche del lunes, ahítas de información. En Toledo, algunos de los pocos comercios abiertos, con sus propietarios de gesto perplejo, emitían desde su oscuro interior un sonido añejo.
Distinto al de los sonidos de los móviles: era la radio escuchada desde un transistor que hacía de la situación una escena de hace cincuenta años y más atrás. Todos los aparatos de este tipo se agotaron en las tiendas.
Las ondas se convirtieron mucho tiempo después en la única conexión con el mundo. Todo un triunfo sobre la tecnología derrotada sin concesiones en una España devuelta al pasado inconcebiblemente con unos pocos afortunados en torno a un viejo receptor, o los menos en sus coches convertidos en imprevistas cabinas de información.
