Los alcaldes socialistas de Castilla y León dejan solo a su secretario general en su seguidismo a Sánchez

Problemas para Carlos Martínez, que últimamente no gana para disgustos. El secretario general del PSOE de Castilla y León y alcalde de Soria se ha quedado solo en su seguidismo hacia Pedro Sánchez dentro de los primeros ediles socialistas de las capitales de la región.

En primer lugar, el regidor leonés, José Antonio Díez, lleva semanas aireando el presunto pucherazo que sufrió en las primarias de 2022 y llamando al presidente del Gobierno y secretario general de su partido a «asumir responsabilidades» tras haber nombrado a dos secretarios de Organización presuntamente corruptos –José Luis Ábalos y Santos Cerdán–.

En segundo lugar, la alcaldesa de Palencia, Miriam Andrés, pedía en el Comité Federal a Sánchez que no sea candidato en 2027 ante la pérdida de «credibilidad» y «confianza» de su gestión al frente del partido. La tercera alcaldía socialista en cuestión, la soriana, se pliega ante Ferraz y niega incluso que la limpia efectuada este fin de semana en el Comité Federal por parte del secretario general de los del puño y la rosa se deba a lo que todo el mundo se cree que se debe: a las «ramificaciones» –Díez dixit– de Cerdán en la comunidad autónoma.

Así, el sábado, el líder de los socialistas de Castilla y León negaba las «informaciones que no se ajustan a la realidad» sobre que la purga de Sánchez a la burgalesa Esther Peña, hasta entonces portavoz nacional del partido, y al leonés Javier Alfonso Cendón, que dirigía el área de Ciencia, Innovación y Universidades, se debiese a su cercanía al exsecretario de Organización encarcelado por una trama de mordidas.

«Nada más lejos de la realidad», apuntaba Martínez , quien indicaba que ambos se marchaban «por decisión propia y por el compromiso que tienen con su tierra», al estar al frente de sus respectivas secretarías provinciales. Este lunes, iba más allá en su apoyo a Sánchez al indicar que éste se había ganado «con creces» el derecho a decidir sobre su futuro político, en contra de las voces que piden un relevo al frente de la secretaría general socialista.

El líder del PSCyL también precisaba que él no quería elecciones anticipadas, como pide la oposición ante la cascada de casos de presunta corrupción que salpican a su Gobierno, su partido y su familia, y como demandaba el presidente de Castilla- La Mancha, Emiliano García-Page, este fin de semana. Martínez también criticó las declaraciones del alcalde de León sobre su número dos en la federación castellanoleonesa.

Los «tentáculos» de Cerdán

Díez afirmaba hace unos días que la situación de Cerdán y Cendón «afecta de forma colateral al PSOE de Castilla y León» por el hecho de que «una de las personas que era la mano derecha de Cerdán en el proceso de primarias locales de 2022 es ahora la actual vicesecretaria general», Nuria Rubio. «Los tentáculos y ramificaciones podrían llegar mucho más lejos en cuando a responsabilidad, malas praxis y beneficios por ser amigos de», advertía el primer edil leonés.

Sobre estas declaraciones, Martínez aseguraba este lunes que «sembrar dudas no ayuda» y que esas palabras se derivaban de «cuitas» y batallas internas del pasado que no deberían usarse ahora. «No puedo compartir ningún extremo de las palabras del compañero José Antonio», apuntaba el regidor soriano, quien zanjaba que el PSOE está «absolutamente limpio de corrupción económica, política y cualquier atisbo de manipulación orgánica».

Paradójicamente, apenas unas horas después de pronunciar Martínez esas palabras, el procurador leonés Diego Moreno anunciaba que denunciaría ante la dirección federal del PSOE las «claras» irregularidades cometidas en el proceso de primarias de la formación en León, que terminaron con la reelección de Cendón, en un asunto que el partido en Castilla y León había resuelto indicando que pudieron ocurrir algunos hechos que, en todo caso, no alteraron los resultados de la consulta a la militancia, que reeligió a Cendón como líder provincial con el 66 % de los apoyos.