Un juicio a un violador, en una imagen de archivo
Los delitos sexuales se disparan en tres provincias de Castilla y León
Palencia, Salamanca y Segovia son los lugares donde más crecen, según los últimos datos del Ministerio del Interior
Los datos del último Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior, relativos al segundo trimestre de este año, arrojan un resultado alarmante en varias provincias de Castilla y León en cuanto a delitos sexuales. Palencia, Salamanca y Segovia copan esta estadística, con una evolución muy negativa respecto al mismo periodo del año pasado.
Comenzando por la provincia palentina, los denominados «delitos contra la libertad sexual» pasaron de 15 a 26, en un incremento del 73,3 %. Las agresiones sexuales con penetración aumentaron un 25 %, pasando de cuatro a cinco; y el resto de delitos contra la libertad sexual crecieron un 90,9 %: de 11 a 21.
En la provincia salmantina ocurrió algo muy parecido. Los delitos contra la libertad sexual cometidos en el segundo trimestre de 2024 fueron 47 y este año, 59 (un 25,5% más); las agresiones sexuales con penetración –violaciones– pasaron de 12 a 23, un aumento del 76,9 %; y el resto de delitos sexuales creció un 5,9 %: de los 34 de ese periodo del año pasado a los 36 de 2025.
En Segovia, tres cuartos de lo mismo, aunque con mayor gravedad, si cabe, con un aumento del 93,8 % en el primer tipo de delitos (de 16 a 31), del 100 % en el segundo (de cinco a diez), y del 90,9 % en el tercero, incrementándose en diez casos, de 11 a 21.
Abusos, violaciones... unos actos delictivos que, sin embargo, en el conjunto de Castilla y León no experimentan un auge tan radical. De esta manera, en la comunidad autónoma se contabilizaron 310 delitos contra la libertad en el segundo trimestre de 2024 y en el mismo lapso de este año éstos subieron hasta los 332 (un 7,1 % más). Respecto a las violaciones, este año se produjo una más entre marzo y junio respecto al mismo periodo del año pasado (de 71 casos a 72, un 1,4 % más) y el resto de delitos de esta índole pasaron de 239 a 260 (un 8,8 % más).
Ávila, en el lado opuesto
Y si las cifras de Palencia, Salamanca y Segovia son para echarse las manos a la cabeza, en algunas otras provincias castellanoleonesas pasa justo lo contrario. Es el caso de Ávila, donde estos delitos no solo no se disparan, sino que se reducen drásticamente. Así, los delitos contra la libertad sexual cayeron un 20,8 % (de 24 a 19); las agresiones sexuales con penetración, un 75 % (de cuatro a una); y el resto de delitos sexuales, el 10 % (pasando de 20 a 18).
Las infracciones penales han aumentado en general en Castilla y León un 5,8 %, impulsadas por la cibercriminalidad, que aumenta un 10,5 %. En la criminalidad convencional, los homicidios dolosos y asesinatos consumados crecieron un 60 %, pasando de cinco casos a ocho, y las riñas tumultuarias hicieron lo propio (de 475 a 533). Sin embargo, hay otros delitos que cayeron con fuerza, como los robos de vehículos (-15,1 5) o los de tráfico de drogas, que descendieron un 7,6 %.
