El secreto mejor guardado de los pinares de Valladolid vuelve a reunir a un pueblo entero: «Estamos muy orgullosos»

En el corazón de la meseta vallisoletana, la pequeña localidad de La Zarza se prepara para celebrar las 'III Jornadas del Nícalo'. Un encuentro cultural y gastronómico donde el hongo de color anaranjado —tan ligado al pinar y al paisaje castellano— se convierte en bandera de identidad local. El evento, que se celebrará entre el 14 y 16 de noviembre, reúne a vecinos y visitantes, y se ha convertido en una cita consolidada del calendario provincial.

«Estamos muy orgullosos de esta tierra. El nícalo forma parte de nuestra identidad y pone a La Zarza en el mapa», explica a este periódico Silvia Domínguez, alcaldesa de la localidad vallisoletana de apenas 120 habitantes. Detrás del programa, que incluye concursos, una feria de artesanía, música o una carrera popular hay una historia sobre las raíces y la tradición.

«Esto va más allá de un producto. Es una manera de mantener viva la historia de La Zarza y de estar en contacto con nuestras raíces. Habla de salir al monte con los padres y los abuelos, de llenar la cesta, de la convivencia en el pinar. También demostramos que los pueblos pequeños podemos hacer grandes cosas», añade Víctor Arribas, teniente alcalde de la localidad.

En 2024, estas jornadas congregaron a cerca de un millar de visitantes durante el fin de semana, y este año esperan mantener o incluso superar esa cifra con un programa más amplio y participativo. Ahora bien, en esta ocasión, los buscadores de nícalos (que rara vez revelan el punto exacto donde encuentran el deseado producto) se enfrentan a una campaña floja debido a que la falta de lluvia y las elevadas temperaturas han retrasado la aparición de hongos.

Un pueblo pequeño e implicado

En La Zarza, la implicación vecinal es la clave del éxito, y también parte de su identidad. El pueblo entero participa. Desde los que cocinan la comida popular, hasta los que ayudan en la carrera o montan los puestos de la feria. La alcaldesa recuerda que «en la edición anterior pasamos de 120 a más de 230 inscritos en la carrera, y fueron los propios vecinos los que organizaron las bolsas y las camisetas. Es emocionante ver esa respuesta», dice.

Las jornadas también atraen a nuevos visitantes, y hasta nuevos residentes. «Nos consta que han venido personas que conocieron La Zarza por el evento, y han terminado comprando una casa aquí. Eso vale muchísimo. Significa que la gente descubre el pueblo y decide formar parte de él», destaca Arribas.

El objetivo, coinciden ambos, es seguir creciendo sin perder el espíritu que les define. «Lo importantes no es atraer solo a visitantes, sino reformar la unión entre vecinos y mantener vivo el sentimiento de comunidad», dice Domínguez.

Música tradicional y carrera popular

La programación de las 'Jornadas del Nícalo' arranca el viernes, con los concursos tradicionales, en los que se premiará a la mejor tapa de nícalo, al nícalo más grande y a la cesta con mayor variedad de hongos. A continuación, se presentará el libro 'El nícalo escondido' y se hará entrega de los galardones del 'III Concurso Fotográfico', que cada año reúne instantáneas de aficionados locales y visitantes. La jornada concluirá con una chocolatada popular en la Biblioteca Municipal Amalia García, escenario de todas las actividades del día.

El sábado 15 será la jornada central, con la ruta por los pinares zarceños guiada por la micóloga Judith Furquet, que partirá desde el monumento al nícalo. «Su forma de explicar es muy didáctica. Habla de micología con un lenguaje sencillo, accesible para todos. Enseña a identificar las especies, a respetar el monte y a disfrutar sin miedo», explica la regidora.

Después tendrá lugar una charla micológica en el pabellón municipal, seguida de una concentración de dulzainas y un pasacalles a mediodía. La actividad de la jornada se completará con una comida popular —una garbanzada con aforo limitado a 100 personas—, y la visita al Museo Etnográfico Santa Eufemia.

Por la tarde se inaugurará la Feria de Artesanía, que contará con la colaboración de la asociación de jotas El Cribero. La jornada se cerrará con un completo programa musical, bautizado como 'Nícalo Fest'. Habrá un concierto de folk a cargo de Cuévano, Mayalde e Hijos del Tercer Acorde. En la jornada también incluirá la degustación de la tapa de nícalo elaborada por el restaurante San Roque.

Las jornadas se despedirán el domingo con deporte y cocina. Por la mañana se celebrará la 'III Carrera y marcha del Nícalo', cuya salida será frente al monumento dedicado a este hongo. Ya por la tarde, el protagonismo pasará a los fogones con el Duelo de fogones y un 'showcooking' que pondrá el broche final a un fin de semana dedicado al nícalo, uno de los productos más emblemáticos de los pinares vallisoletanos.